Amazon se encuentra una vez más envuelto en una polémica laboral, pues el gobierno de los Estados Unidos, por medio de la Junta Nacional de Relaciones del Trabajo (NLRB, por sus siglas en inglés) recomendó organizar una nueva votación sobre la creación de un sindicato en Alabama después de que un grupo de empleados acusara “comportamiento ilícito” por parte de la empresa en el proceso.
La recomendación hacia la compañía proviene del oficial de audiencia asignado al caso y tiene su origen en las quejas del Sindicato de tiendas minoristas, mayoristas y grandes almacenes (RWDSU), el cual apeló el resultado de la votación efectuada en abril, donde se determinó la no creación de un sindicato.
En abril, los trabajadores del centro logístico de la empresa en Bessemer, Alabama, votaron por no sindicalizarse, pero tras el resultado, el RWDSU alegó que la empresa había influido ilegalmente en la campaña.
Entre las situaciones que se argumentaron destacaron la amenaza a empleados con despedirlos o con la pérdida de prestaciones, así como la instalación de un buzón en el estacionamiento del almacén por parte Amazon, en el cual no confiaron los empleados, pues dijeron que se había puesto ahí para vigilar el escrutinio por cámara.