Epic Games cerró los servidores de su popular videojuego, Fortnite, en China. A pesar de su éxito a nivel mundial, Tencent, la empresa que es dueña de la desarrolladora, no ganó ni un centavo en ese país, debido a que los distribuidores nunca obtuvieron el visto bueno del gobierno para vender contenido o artículos para ese juego, el cual se mantuvo en su versión de prueba durante tres años.
La decisión está motivada por una estricta vigilancia de los contenidos de videojuegos por parte del gobierno chino, el cual debe aprobar los títulos para que se publiquen o vendan copias en ese país. Este año, la industria se ha visto especialmente afectada, pues el Estado no ha autorizado un solo juego en más de 100 días.
Alrededor del mundo, Fortnite es uno de los juegos más populares, con más de 350 millones de usuarios, es decir, una cifra mayor a la población de Estados Unidos. Sin embargo, esa fama no le alcanzó para poder tener mayor relevancia en China.