Rappi, la plataforma de reparto de comida, consiguió una suspensión provisional ante el impuesto del 2% del valor total de cada entrega en la Ciudad de México, debido a que impacta en todas las personas implicadas en su negocio, desde consumidores hasta repartidores.
“Repercute en los consumidores, usuarios y los repartidores, además de que representa una barrera para la reactivación económica y la digitalización de la economía afectando a los pequeños y medianos comercios de la capital”, dijo la empresa a través de un comunicado.
Asimismo, se mostraron esperanzados de que la resolución favorezca a la “construcción de medidas que beneficien a la economía digital y a sus usuarios”.