La batalla entre Sony y Microsoft por la compra de Activision Blizzard no termina y es que la empresa japonesa pidió al organismo regulador del Reino Unido, la Autoridad de Competencia y Mercado, negociar o vender Call of Duty para permitir la transacción de 69,000 millones de dólares.
De acuerdo con la compañía matriz de PlayStation, esa es la única solución para evitar daños a los jugadores en el mercado de las consolas de videojuegos, así como en el de juegos en la nube.
Cabe recordar que el mes pasado, la CMA publicó sus conclusiones provisionales respecto a este caso y destacó que si el acuerdo de compra se concreta podría haber una disminución sustancial de la competencia en el mercado del gaming para los jugadores de Reino Unido y por ello sugirió a Microsoft la venta del popular videojuego.