Si bien la noticia representaría un gran problema para Apple, que tiene gran presencia en China, en realidad la empresa ya sabe lo que representa que sus dispositivos no sean utilizados por funcionarios, pues Pekín había restringido el uso de sus teléfonos en algunas agencias gubernamentales.
No obstante, ahora la prohibición será más amplia con el fin de reforzar la ciberseguridad del Estado, aun cuando China es el mayor fabricante de iPhone en todo el mundo y se calcula que el 19% de las ventas de Apple en ese país proviene del gobierno.
Por otra parte, Apple es la empresa que más teléfonos inteligentes vende en China, de acuerdo con un análisis de la firma Counterpoint, la cual reveló que durante el 2022, el iPhone fue líder en el mercado, con una cuota del 6.6%, posicionándose incluso por encima de marcas locales, como Honor, Oppo o vivo.
La otra explicación de este asunto es la fuerte tensión y el trato hacia las empresas de tecnología chinas, como Huawei y TikTok, pues el gobierno de Biden detuvo las licencias para el suministro de tecnología a la primera, además de que desde la era Trump se detuvo el uso de esta plataforma y se impusieron fuertes restricciones para acceder a los servicios de Google.
Respecto a TikTok, en diciembre del 2022 el senado de Estados Unidos aprobó por unanimidad una ley a través de la cual se prohibió el uso de la plataforma de videos cortos en los dispositivos móviles del gobierno de ese país por sus preocupaciones en torno a la ciberseguridad.
China reduce la dependencia a la tecnología extranjera
Desde hace más de 10 años, China ha intentado reducir su dependencia hacia la tecnología extranjera. Incluso ha solicitado que sus compañías afiliadas al Estado, como bancos, modifiquen su software y promuevan el uso de recursos digitales locales.
Reuters informó en mayo de este año que el gobierno instó a las grandes empresas a asumir un papel clave para asegurar la autosuficiencia tecnológica, en medio de las grandes disputas con Estados Unidos.
Uno de las más importantes de esos enfrentamientos está sucediendo en el terreno de los semiconductores, pues la administración Biden prohibió a algunas de sus grandes compañías en el área, como Nvidia, la venta de tecnología de última generación para evitar el desarrollo de su tecnología.