La tendencia de volver a fumar cigarrillos tradicionales va en contra del discurso más constante de la industria del cigarrillo electrónico, que dice: "vapear ayuda a las personas a dejar de fumar cigarrillos".
El vapeo se ha convertido en un gran negocio, con un mercado global proyectado para llegar a 48,000 millones de dólares en 2023.
La empresa Juul Labs, con sede en San Francisco, controla el 75% del mercado de cigarrillos electrónicos y según su misión, tiene como objetivo eliminar los cigarrillos al dar a los fumadores adultos “las herramientas para reducir o eliminar su consumo por completo”.
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¿Qué es más dañino?
Aunque es bien sabido que que los cigarros contienen toxinas y productos químicos que son peligrosos para su salud, los vapeadores por su parte, son sumamente adictivos, pues tan solo una cápsula con 30 mililitros del producto proporciona alrededor de 200 bocanadas, contiene tanta nicotina como un paquete de cigarros.
Aunque la industria dice que el vapeo está destinada a los adultos, logró captar la atención de los más jóvenes desde hace unos dos años gracias a sus dulces y llamativos sabores frutales.
Para inhibir el consumo entre la gente joven, Estados Unidos planea prohibir la venta de cigarrillos electrónicos saborizados, a menos que sean sabor tabaco.