Síntomas del glaucoma del ángulo cerrado
Algunos de los síntomas iniciales de un ataque pueden incluir visión borrosa, halos de luz, dolores de cabeza leves o dolor en el ojo. Las personas con estos síntomas, de acuerdo con la American Academy of Ophthalmology, deben ser examinadas por un oftalmólogo tan pronto como sea posible. Un ataque de glaucoma de ángulo cerrado incluye los siguientes síntomas:
- dolor severo en el ojo o la frente
- enrojecimiento del ojo
- disminución de la visión o visión borrosa
- visión de arco irises o halos de luz
- dolor de cabeza
- náusea
- vómito
Tratamiento del glaucoma
Cuando el afectado ha perdido entre 40 y 60 grados de la periferia del campo visual, empiezan a tropezar con los objetos a su alrededor, a presentar dificultad para adaptarse a la oscuridad y a detectar que no ven a las personas a su alrededor, y piensan que es una distracción.
Entonces ya se considera glaucoma avanzado, y sólo puede controlarse con la ayuda de fármacos para reducir la presión que ejercen los líquidos intraoculares sobre el nervio óptico, aunque en ocasiones ya no es posible el control, sólo queda retardar en la medida de lo posible la pérdida de la visión, reconoció Mary Carmen Bates, especialista en rehabilitación visual.
“Nuestra tarea es identificarlo, porque muchos pacientes no se percatan de su presencia, sino hasta que se manifiesta la pérdida del campo visual periférico”.
Es un trastorno progresivo y crónico, “no podemos frenarlo de manera sencilla, y si bien es importante entender que la carga genética tiene mucho que ver, existen enfermedades sistémicas vinculadas, además de otras afecciones genéticas”, abundó Óscar Ramos, especialista de la FES Iztacala.
Este 12 de marzo se conmemora el Día Internacional del Glaucoma, enfermedad que representa la segunda causa común de ceguera en el mundo en personas mayores de 40 años, sólo después de la catarata, y al ser una enfermedad ocular silenciosa, ocasiona ceguera irreversible.