El nuevo esquema de compra de medicamentos y material de curación del gobierno dejó un sabor agridulce para la industria. La falta de claridad y el acotado tiempo del proceso fueron algunos de los obstáculos que enfrentó la industria y que dio como resultado un gran número de partidas declaradas desiertas, ya sea por falta de información o porque no se cumplió con el costo máximo propuesto.
Las farmacéuticas ven poco clara la megacompra de medicamentos de AMLO
La compra consolidada de medicamentos y material de curación tuvo un 62% de partidas declaradas desiertas, es decir, lotes de medicinas que no fueron adquiridos, y que podrán ser sometidas a adquisiciones directas para cumplir con el abastecimiento, señalaron en un comunicado conjunto la Secretaría de Hacienda y la Secretaría de Salud.
Lee: Así inicia la nueva era de la adquisición de medicamentos
El número de partidas declaradas desiertas supera al 8% de la licitación que tuvo lugar en noviembre, dijo Rafael Gual Cosío, director general de la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica (Canifarma). “De estas claves desiertas, muchas fueron por aspectos técnicos derivados de la inexperiencia por parte de la industria y del gobierno, que creo que podrían revisarse para que hubiera un mejor abasto”.
El gobierno acusó que hubo resistencias al nuevo proceso, pero para la industria no fue sencillo. El proceso de licitación duró alrededor de un mes y, durante las juntas de aclaraciones, las empresas hicieron más de 6,000 cuestionamientos a las autoridades sobre el proceso que fueron respondidos con poca claridad, dificultando la participación, explicó Gual Cosío.
El dirigente de la Canifarma señaló que hubo considerables descuentos en un gran número de medicamentos, pero no en otros, pues los precios máximos establecidos por el gobierno no eran compatibles con los precios de las empresas. Aun con ello, durante el proceso se recibieron 287 propuestas por parte de empresas en todo tipo de lotes de medicamentos y material de curación.
Entre las partidas que fueron declaradas desiertas por temas económicos se encontraron pañales, fórmula para lactantes y niños, medicamentos como peroxicam, ciprofloxacino, ampicilina, amoxicilina, y materiales como jeringas, tubos de recolección de sangre y ropa quirúrgica entre otros.
Los precios máximos de referencia se establecieron a partir de una investigación de mercado internacional, explicó en el comunicado de resultados de la licitación Hacienda y Salud. La compra de medicamentos que cerró el viernes equivale a cerca de 7,000 millones de pesos (mdp) de los 17,000 mdp que tenía considerado adjudicar el gobierno. Sin embargo, el monto representa un ahorro de 20% respecto al año anterior.
Lee: ¿Qué tanto dependen las farmacéuticas de las ventas a gobierno?
El descuento solo considera la compra de medicamentos y no la distribución, por lo que habrá que revisar el costo final que tenga la logística para conocer si hubo realmente un ahorro o no, destacó el representante de los fabricantes. La invitación para la logística integral, almacenamiento y distribución de medicamentos se lanzó el pasado jueves y los participantes tienen hasta el martes 2 de julio para presentar sus propuestas.
Por ahora, el representante explicó que los fabricantes están listos para abastecer las demandas de gobierno. “La industria tiene capacidad, inclusive muchas empresas generaron ya inventarios para surtir”, comentó.
Entre las empresas que obtuvieron contratos de compra se encuentran Pisa, Bioresearch, Grupo Bruluart, CLS Behring, Probiomed, Landsteiner Scientific, entre otras.