El gobierno tiene como meta que todos los mexicanos tengan acceso a un hogar digno, económico y rodeado de servicios públicos mediante la construcción de más casas de interés social, pero la falta del Programa Nacional de Vivienda con las reglas que apoyen a este segmento todavía genera incertidumbre entre las desarrolladoras.
En segundo trimestre del año, el volumen de unidades de todos los segmentos comercializadas por algunas vivienderas enlistadas en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cayó. Las de Javer bajaron 30%; las reportadas por Vinte, 18%; Ara, 17% y Cadu 7%, en comparación con el mismo periodo de 2018. Por segmento, las vivienderas registraron mayor escrituración de inmuebles dedicados a niveles medio y residencial, cuyos precios superan los 500,000 pesos.