La multa impuesta a una empresa, de la que nunca se reveló su identidad, por los daños al medio ambiente provocados por el desmonte ilegal de vegetación en el predio donde ahora se construye la refinería de Dos Bocas, en Tabasco, sigue sin cobrarse a pesar de que la empresa responsable había admitido su responsabilidad.
El Senado lo rechazó y ahora liderará al regulador ambiental de energía
La compañía sancionada hizo una solicitud a la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos (ASEA) para modificar o eliminar el pago de la multa de 13.9 millones de pesos (mdp) por estos trabajos realizados a finales del año pasado.