Ari Bergmann, cuya firma se especializa en riesgos de manejo difícil, dice que los inversionistas deberían cubrirse contra las consecuencias de una solución en Washington.
Lo que quiere decir el veterano del mercado es que el Tesoro tendrá que esforzarse para reponer su reserva de caja cada vez menor para mantener la capacidad de pago de sus obligaciones, a través de una avalancha de ventas de letras del Tesoro. Estimada en más de 1 billón de dólares para fines del tercer trimestre, la oferta drenaría rápidamente la liquidez del sector bancario, elevaría las tasas de financiamiento a corto plazo y presionaría la economía de EU, que está al borde de una recesión. Según la proyección de Bank of America, tendría el mismo impacto económico que un aumento de un cuarto de punto porcentual en la tasa de interés.
Los costos de endeudamiento más altos a raíz del ciclo de ajuste más agresivo de la Reserva Federal en décadas ya han afectado a algunas empresas y obstaculizan lentamente el crecimiento económico. En este contexto, Bergmann está atento especialmente a una eventual medida del Tesoro para reponer la caja, ya que ve potencial para una reducción masiva de las reservas bancarias.
“Mi mayor preocupación es que cuando se resuelva el límite de la deuda, y creo que así hará, habrá una pérdida de liquidez muy profunda y repentina”, dijo Bergmann, fundador de Penso Advisors, con sede en Nueva York. “Esto no es algo muy obvio, pero sí es muy real. Y hemos visto antes que una caída así en la liquidez realmente afecta negativamente a los mercados de riesgo, como las acciones y el crédito”.
El resultado es que, incluso después de que Washington resuelva este impasse, la dinámica del saldo de caja del Tesoro, el programa de reducción de la cartera de la Fed conocido como ajuste cuantitativo, y el impacto de las tasas más altas pesarán sobre los activos de riesgo y la economía.
Después de una resolución sobre el techo de la deuda, la reserva de caja de EU —la Cuenta General del Tesoro— debería aumentar a 550,000 millones de dólares a fines de junio desde el nivel actual de alrededor de 95,000 millones de dólares, y alcanzar los 600,000 millones de dólares tres meses después, según las estimaciones más recientes del departamento.
El repunte afectará la liquidez en todo el sistema financiero porque la pila de efectivo opera como la cuenta corriente del gobierno en la Fed, ubicada en el lado del pasivo del balance del banco central.
Cuando el Tesoro emite más letras de las que técnicamente necesita durante un período determinado, su cuenta se expande, retirando efectivo del sector privado y almacenándolo en la cuenta del departamento en la Fed.
Otra pieza importante del rompecabezas es el acuerdo de recompra inversa de la Reserva Federal, conocido como RRP, que es donde los fondos del mercado monetario depositan dinero en el banco central durante la noche a una tasa de poco más del 5%.