Aunque en el comunicado no se menciona el estancamiento de las negociaciones para aumentar el límite de la deuda estadounidense, el tema estuvo presente constantemente en los debates.
El estancamiento ha afectado a los mercados, ya que los costos de los préstamos han subido debido al agresivo endurecimiento monetario de los bancos centrales de Estados Unidos y Europa.
"La economía mundial ha mostrado resistencia frente a múltiples perturbaciones, como la pandemia del COVID-19, la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania y las presiones inflacionarias asociadas", afirmaron los ministros de Finanzas y los banqueros centrales.
"Debemos permanecer vigilantes y mantenernos ágiles y flexibles en nuestra política macroeconómica en medio de una mayor incertidumbre sobre las perspectivas económicas mundiales", añadieron en el comunicado posterior a la reunión.
La secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, que ha dicho que podría producirse el primer impago de la historia de Estados Unidos en cuestión de semanas si no se supera el punto muerto, dijo a Reuters el sábado que el estancamiento es "más difícil" que en el pasado, pero mantenía la esperanza de una solución.
El ministro de Finanzas británico, Jeremy Hunt, afirmó que sería "absolutamente devastador" que Estados Unidos no llegue a un acuerdo para elevar el límite de endeudamiento federal y vea su crecimiento económico "desbaratado".
Los jefes de los bancos centrales del G7 prometieron combatir la "elevada" inflación y garantizar que las expectativas sobre la evolución futura de los precios se mantengan bien ancladas, señal de que muchos de ellos no bajarán la guardia ante una inflación obstinadamente alta.
El ministro de Finanzas japonés, Shunichi Suzuki, declaró en la rueda de prensa posterior a la reunión que el tema del techo de la deuda se debatió en una cena celebrada el jueves por la noche. No quiso dar más detalles.