“Lo que vimos fue una fuerte aversión al riesgo posterior al anuncio de tarifas por parte del gobierno de EU, lo que ocasionó salidas de capital hacia activos considerados más seguros, como la renta fija o el oro”, explica Alfonso Jarquín, director de Inversiones en VALMEX Casa de Bolsa.
Estas salidas se dieron en el contexto del Liberation Day, una jornada marcada por nuevas sanciones comerciales que reactivaron los temores de una guerra comercial encabezada por Estados Unidos, especialmente con China, las dos principales economías a nivel global. El anuncio de aranceles a diversas economías encendió las alertas sobre un posible repunte en la inflación y una desaceleración económica, ya que el encarecimiento de los productos importados en el país vecino se traslada al consumidor final, elevando los precios. Este efecto puede provocar una disminución en la demanda y, con ello, frenar el crecimiento económico.
“Hay una percepción de que el riesgo en Estados Unidos está aumentando debido a esa política comercial que no tiene absolutamente ningún sentido económico”, comentó Carlos Serrano, economista en Jefe de BBVA México, durante el Foro de Emisoras de Grupo BMV, en junio.
A pesar de estas salidas de capital, Jarquín asegura que no se trata de un éxodo estructural, sino más bien es un tema coyuntural. Estados Unidos es el rey del mercado, tan solo en la renta variable, las acciones de ese país pesan alrededor de 60% en el MSCI ACWI, un índice que está compuesto por los principales valores de mercados desarrollados y emergentes, lo que le otorga una posición dominante en las carteras internacionales. Sin embargo, los inversionistas están diversificando cada vez más sus exposiciones hacia otras regiones, motivados por razones de valuación y expectativa de crecimiento.
“Europa, por ejemplo, ha captado gran parte de los flujos este año, impulsado por el anuncio de un ambicioso paquete fiscal en Alemania, que rompió con el tradicional conservadurismo de gasto de la región”, señala Jarquín.
Tan solo el DAX, el principal índice accionario de Alemania, ha subido alrededor de 20% en lo que va del año, un desempeño superior al S&P500, el índice más importante del mercado estadounidense y que acumulan un alza de 16% en el mismo periodo.
Las salidas de capital se ven reflejadas también en el comportamiento de la moneda, que ha mostrado signos de debilidad frente a otras divisas. El índice dólar, que mide a la divisa estadounidense frente a otras, ha caído alrededor de 10% en lo que va del año y se encuentra en su nivel más bajo desde enero de 2022, de acuerdo con investing.com. Este debilitamiento también se explica, dice Jarquin, por la tendencia de diversificación de activos por parte de los bancos centrales, especialmente en reservas que antes estaban fuertemente invertidas en bonos del Tesoro, como es el caso de China.
De acuerdo con los últimos datos publicados por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos, en octubre hubo un flujo neto de capital hacia fuera del país por aproximadamente 37.3 millones de dólares, de los cuales 19.2 millones corresponden a salidas de instituciones oficiales, como los bancos centrales, una salida inusual pues estas instituciones suelen comprar bonos cuando el dólar está débil.