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Cheesy Verse: la experiencia inmersiva con la que Cheetos posiciona su marca

La prohibición de utilizar personajes infantiles en empaques de alimentos impulsó a los fabricantes de frituras a buscar nuevas formas de conectar con su audiencia.
lun 04 septiembre 2023 03:46 PM
Cheese Verse, la experiencia inmersiva de Cheetos. (Cortesía)
Cheese Verse, la experiencia inmersiva de Cheetos. (Cortesía)

PepsiCo está apostando por las experiencias inmersivas para mantener la conexión de los sus consumidores con su marca Chester Cheetos. La semana pasada abrió la puerta del Cheesy-Verse, una residencia repleta de alusiones al icónico personaje, que tuvo que desaparecer de los empaques y anuncios publicitarios de las frituras de queso tras la publicación de la NOM-051, que prohíbe el uso de personajes infantiles en empaques de alimentos.

Ante las restricciones impuestas por el gobierno, marcas de frituras como Chester Cheetos han tenido que reinventar su estrategia de conexión con los consumidores más jóvenes. Durante años, habían utilizado la impresión de imágenes de personajes en sus empaques y en sus comerciales como un recurso efectivo para atraer a este público. Sin embargo, la prohibición de utilizar estas imágenes en empaques de alimentos con exceso de sodio, calorías, grasas y azúcares les obligó a buscar nuevas formas de conectar con su audiencia.

Una de estas estrategias innovadoras ha sido la creación de experiencias inmersivas, como la apertura de la casa de Chester, que no solo mantiene viva la relación con su icónica mascota, sino que también ofrece un espacio interactivo y memorable para sus jóvenes consumidores.

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¿Cómo es el Cheesy-Verse?

El espacio se encuentra dividido en tres áreas: la primera, destinada a la diversión; la segunda, al mundo de la moda; y la tercera, a la gastronomía.

Para adentrarse en el mundo de Chester, uno debe recorrer un pasillo iluminado con luces vibrantes, donde el color naranja prevalece, conduciéndote finalmente al Cheesy Verse. Aquí, la primera zona conocida como el "Funny Verse", ofrece una variedad de actividades, desde pisar las manchas de leopardo en el suelo para que cambien de color, hasta un pasillo cuyas paredes están adornadas con decenas de colas de Chester.

En el "Fashion Verse", la siguiente etapa de la experiencia, los asistentes pueden sumergirse en una zona diseñada para maquillarse con los colores icónicos de la mascota de Cheetos. Además, tendrán la oportunidad de explorar piezas de ropa inspiradas en la marca, como una chamarra cuya textura evoca las formas de las frituras. Al final del recorrido, los visitantes llegan al "Foodie Verse", donde pueden acceder a una variedad de comidas y bebidas, como los esquites con Cheetos.

"Todo se origina en la idea de crear un espacio donde las personas puedan disfrutar. En ocasiones, sentimos que faltan lugares adecuados para que los jóvenes salgan, se diviertan, interactúen y expresen su creatividad. De esta premisa nace todo el concepto; es una experiencia dinámica que fomenta la interacción", comenta Paola Hernández, Directora de Marketing de Cheetos.

“Las marcas tenemos que meternos en el mundo de nuestros consumidores, no sólo es tener un diálogo único, sino también interactuar con ellos, entenderlos y saber qué es lo que quieren, que vean la marca es lo que nos hace tener una conexión única con ellos”, declara la directiva.

El Chessy Verse se puede visitar hasta el 8 de octubre.

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El 'boom' de las experiencias inmersivas

Según Juan Manuel Ramírez Belloso, director del programa de posgrados en la Escuela Bancaria y Comercial (EBC) y experto en mercadotecnia, estas experiencias representan una oportunidad para promocionar la marca de manera orgánica a través del "boca a boca". Sin embargo, su valor va más allá, ya que establece una conexión emocional profunda con los consumidores.

"Es una estrategia efectiva para fortalecer el posicionamiento de la marca en diversas dimensiones. En primer lugar, permite forjar una conexión emocional más sólida con la marca, generando experiencias memorables que aumentan la lealtad del cliente a través de los cinco sentidos", afirma el experto de la EBC.

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El especialista explica que esta experiencia inmersiva también refuerza la identidad de la marca, adoptando un enfoque divertido que se ajusta a la imagen del producto y su mascota. Además, se convierte en un elemento diferenciador en un mercado altamente competitivo.

"Los consumidores pueden recordar una marca y elegirla sobre su competencia si la experiencia resulta memorable. Además, fomenta la fidelidad de los clientes, ya que aquellos que participan desarrollan una lealtad más sólida al sentirse valorados y apreciados. Esto, a su vez, conduce a compras repetidas y a la recomendación a personas que aún no han considerado el producto", declara el experto.

La presencia de Chester en esta experiencia es innegable. El guepardo de color naranja que usa gafas aparece desde la entrada de la casa, y todas las experiencias están intrínsecamente relacionadas con él, lo que mantiene su presencia constante después de haber desaparecido de los envases de las frituras a partir del 1 de abril de 2021, con la implementación de la segunda fase del etiquetado frontal.

En mayo, la filial de PepsiCo, Fritos-Lay, obtuvo un amparo en México para poder nuevamente incluir celebridades, animaciones, deportistas y otros elementos en las envolturas de sus productos, a pesar de la prohibición de etiquetado de advertencia en el país. El juez Francisco Rebolledo del juzgado 6 de Distrito en materia administrativa de la Ciudad de México concedió esta medida precautoria a la empresa propietaria de marcas como Sabritas, incluyendo Cheetos.

A la par de este amparo, las experiencias inmersivas mantienen viva la imagen de Chester como la figura divertida que, al mismo tiempo, se convierte en un distintivo que diferencia a Cheetos de otras marcas de frituras en el mercado.

"Chester es una parte integral de Cheetos, no se puede separar de la marca, y esta experiencia representa una forma de interactuar con ella", enfatiza la directora de marketing de Cheetos.

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