Publicidad
Publicidad

El aeropuerto de Hong Kong reanuda operaciones, pero la tensión sigue

Cinco personas son arrestadas y seis más fueron están en el hospital después de las protestas del martes, pero la crisis política va en aumento
mié 14 agosto 2019 11:26 AM
Nuevas medidas.
El aeropuerto anunció que las autoridades empezarían a revisar pases de abordar y pasaportes en la entrada de la sala de salidas, para evitar nuevas manifestaciones.

HONG KONG (CNN)- El aeropuerto de Hong Kong reanudó operaciones el miércoles, unas horas después de que miles de manifestantes antigobierno obstruyeran el acceso a la terminal principal y paralizaran temporalmente este centro de conexiones por segunda noche consecutiva.

Las autoridades señalaron que arrestaron a cinco personas y seis terminaron hospitalizadas tras el caos y las escenas desagradables que reinaron en el aeropuerto la noche del martes, 13 de agosto. Las protestas se intensifican y se están transformando en una crisis política cada vez más inestable.

Publicidad

Las autoridades chinas censuraron a los manifestantes el miércoles y señalaron que sus actos equivalen a "violar lo más básico de la ley, la moralidad y la humanidad".

Lee: Lo que debes saber sobre las protestas en Hong Kong

"Cometieron delitos violentos graves a la vista del público, cosa horripilante y escalofriante. Su conducta muestra su profundo desprecio por el imperio de la ley", dijo Xu Luying, vocera de la Oficina de Asuntos de Hong Kong y Macao.

A principios de la semana, la prensa estatal china hizo circular un video con el que pretende mostrar que ha aumentado la presencia militar en la ciudad de Shenzhen, en la frontera con Hong Kong. Hasta ahora, no hay indicios de que se vayan a desplegar tropas.

El movimiento de protesta comenzó a principios de junio en oposición a un proyecto de ley de extradición que, de acuerdo con sus detractores, podría usarse para juzgar a los disidentes en la China continental. El proyecto de ley quedó congelado , pero las protestas desencadenaron un descontento civil más amplio que no da señas de menguar.

El martes hubo varios disturbios; los manifestantes superaron en número a los elementos de seguridad aeroportuaria y usaron los carritos portaequipaje para hacer barricadas frente a los arcos de seguridad para impedir que los pasajeros entraran a las salas de abordaje.

Publicidad

Entre gran tensión, los manifestantes rodearon a un hombre al que acusaron de ser un agente de la policía china que había intentado infiltrarse en las protestas. Más tarde, las autoridades chinas señalaron que el hombre era el Sr. Xu, un habitante de Shenzhen que había viajado al aeropuerto de Hong Kong a despedir a un amigo. Los paramédicos atendieron al hombre que aparentemente se había desmayado, pero los manifestantes no dejaron que se lo llevaran. A esto siguió un duelo tenso de varias horas, que terminó cuando la Policía llegó y ayudó a los paramédicos a llevar al hombre a la ambulancia.

Lee: La brecha generacional que está detrás de las manifestaciones en Hong Kong

La Policía antimotines llegó poco después, pero se retiró. Sin embargo, se desató un choque con policías uniformados; circuló un video en el que se ve a un manifestante atacando a un agente por la espalda y quitándole el tolete. El agente tomó su arma en respuesta, pero no disparó.

Los manifestantes también detuvieron y ataron a un ciudadano chino a un carrito portaequipaje. Más tarde, se dio a conocer que el hombre era un reportero del Global Times, un periódico sensacionalista del gobierno chino. Tanto él como Xu siguen en el hospital, de acuerdo con las autoridades chinas.

En una conferencia de prensa este miércoles, la Policía de Hong Kong acusó a los manifestantes de agredir y privar de la libertad a un hombre, así como de impedir que los paramédicos lo atendieran. Mak Chin-ho, comisionado asistente de la Policía, dijo a los reporteros que algunos manifestantes habían hecho "barricadas y usado apuntadores láser" para detener a la Policía, lo que significa que "tomó varias horas llegar al hombre lesionado".

Publicidad

Mak señaló que un agente sacó su arma en defensa luego de que "los manifestantes lo arrinconaran para golpearlo y le quitaran su gas pimienta y su tolete".

La Policía advirtió que llevar a cabo actividades ilegales en el aeropuerto podría conllevar una pena mayor, incluso cadena perpetua.

Se reanudan las operaciones en el aeropuerto

Cuando se reanudaron las operaciones aeroportuarias el miércoles, todavía podían verse las cicatrices del descontento de la noche anterior: los empleados se afanaban en quitar las manchas de los pisos y el grafiti de las paredes.

El aeropuerto anunció que las autoridades empezarían a revisar pases de abordar y pasaportes en la entrada de la sala de salidas a partir de las dos de la tarde del miércoles (1:00 am, hora de la Ciudad de México).

Timothy Wu, gerente asistente de comunicaciones corporativas del aeropuerto internacional de Hong Kong, dijo a CNN que por ahora solo se monitorizaría la entrada de pasajeros de salida. Se cerraron dos de las entradas y solo dos quedaron abiertas.

El año pasado, más de 74 millones de pasajeros pasaron por este aeropuerto, que maneja 1,100 vuelos de carga y pasajeros al día y conecta con unos 200 destinos de todo el mundo.

Lee: China culpa a EU de las protestas en Hong Kong: estas son sus razones

Las autoridades aeroportuarias anunciaron el miércoles que habían obtenido una orden temporal que les permite detener a personas que "obstruyan o interfieran ilícita y voluntariamente con el uso correcto del aeropuerto internacional de Hong Kong". Lo más probable es que la orden ayude a las autoridades aeroportuarias a impedir que se repita lo ocurrido el martes.

La ciudad está a la expectativa mientras circulan las disculpas

El miércoles, los manifestantes empezaron a ofrecer disculpas por haber perturbado el aeropuerto de la ciudad el martes por la noche. En varios comunicados que se publicaron en un canal de mensajería privada que los manifestantes usan se nota el remordimiento y se apela a la comprensión. "Ofrecemos disculpas por nuestra conducta, pero tenemos mucho miedo", se leía en una publicación. "Nuestra Policía nos disparó, el gobierno nos traicionó y las instituciones sociales nos fallaron. Por favor, ayúdennos".

En otro mensaje se apela directamente a grupos diferentes: "A todos los reporteros, equipos de ambulancias, personal del aeropuerto y a los pasajeros afectados, nos gustaría volver a ofrecer nuestras más sinceras disculpas por todos los inconvenientes y perturbaciones".

Los mensajes, que se publicaron anónimamente, se contraponen a la cobertura prominente de la violencia del martes en los medios estatales chinos.

China ha adoptado un tono más estridente en semanas recientes y se ha centrado en la violencia y en pintar al movimiento de protesta como una táctica de los separatistas radicales bajo el control de "manos negras" extranjeras. El lunes, 12 de agosto, las autoridades chinas señalaron que la situación en Hong Kong había "empezado a mostrar signos de terrorismo".

Sin embargo, los manifestantes son, en su mayoría, jóvenes enojados que carecen de un líder. Se quejan de que el gobierno sigue ignorando sus cinco exigencias, entre las que se cuenta el llamado al sufragio universal y una investigación sobre el presunto uso excesivo de la fuerza y mala conducta de parte de la Policía.

La jefa de gobierno de Hong Kong, Carrie Lam, ha ofrecido disculpas repetidamente por la torpeza con la que su gobierno manejó el proyecto de ley de extradición que desencadenó las protestas y se comprometió a ponerle más atención a la gente. Sin embargo, añadió que los temas políticos se abordarán una vez que se restaure el Estado de derecho.

"La responsabilidad del jefe ejecutivo es garantizar que Hong Kong siga siendo una ciudad segura, ordenada y respetuosa de la ley. Esa es mi máxima responsabilidad", dijo Lam.

Lee: Cuatro muertes ensombrecen las protestas en Hong Kong

"Una vez que la violencia haya parado y que la situación caótica que estamos viviendo ceda —yo no diría que se erradique totalmente—, yo, como jefa ejecutiva, seré responsable de reconstruir la economía de Hong Kong, de abrirme lo más posible, de escuchar con la mayor atención posible a las quejas de mi pueblo y de tratar de ayudar a Hong Kong a seguir adelante".

James Griffiths, Rebecca Wright, Ben Westcott y Yong Xiong, de CNN, contribuyeron con este reportaje.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad