Informes de científicos alarmantes , desobediencia civil, manifestaciones de millones de jóvenes. Desde hace un año, los países firmantes del Acuerdo de París son blanco de una presión sin precedentes que resume la consigna para estas dos semanas de reunión: #TimeforAction.
Ante ello, los mensajes a la acción urgente se repitieron en el día inaugural de la 25ª Conferencia del Clima de la ONU (COP25).
"¿Realmente queremos pasar a la historia como la generación que hizo como el avestruz, que holgazaneaba mientra el mundo ardía?", lanzó desafiante el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
Guterres, ex primer ministro portugués y principal defensor de una acción más ambiciosa para revertir el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, instó a los gobiernos a evitar un "camino de rendición" que pondría en peligro la salud y la seguridad de todos.
Ante los representantes de unos 200 firmantes del Acuerdo de París, entre ellos unos cuarenta jefes de Estado o gobierno, Guterres instó a elegir entre la "esperanza" de un mundo mejor y tomar acciones, o la "capitulación".
Asimismo, instó a los delegados a resolver una importante cuestión pendiente del Acuerdo de París: las normas sobre el mercado de emisiones de dióxido de carbono, consideradas como algo vital para poner en marcha una acción más rápida con el fin de reducir las emisiones.