"Cuando no le iba bien en las encuestas estaba muy preocupada", dijo a AFP. "Pero cuando ganó Carolina del Sur volví a confiar en él".
Para Frank Anderson, un ingeniero informático de 24 años que también votó temprano en Detroit, el candidato es Sanders, por "su coherencia en los últimos 40 años" y "sus políticas dirigidas a restaurar la clase media".
"Soy optimista", afirmó sobre las posibilidades del senador izquierdista.
"Mal día para Bernie"
Pero Trump, quien mete baza en la interna demócrata desde el inicio de la batalla por la nominación partidaria hace más de un año, no opinó lo mismo.
"¡Va a ser un mal día para el Loco Bernie!", tuiteó, apelando a los apodos burlones que usualmente usa para sus opositores.
El presidente ha venido presentando a Sanders como una víctima del poder establecido del Partido Demócrata, que busca "robarle" la elección, lo que algunos expertos creen que podría hacer disminuir la participación electoral y en último término beneficiar a los republicanos.
A pesar del temor de muchos demócratas de que Sanders esté demasiado a la izquierda para ganarle a Trump, el promedio de encuestas nacionales de RealClearPolitics muestra a ambos por encima del mandatario en caso de enfrentamiento (+6.5 Biden y +4.9 Sanders).
Biden, que cuenta con un fuerte apoyo en la comunidad negra, sumó a tres exaspirantes demócratas afroestadounidenses a su campaña en los últimos días: los senadores Cory Booker (Nueva Jersey) y Kamala Harris (California), y el exgobernador de Massachusetts, Deval Patrick.
La semana pasada habían endosado su candidatura Amy Klobuchar, Pete Buttigieg, Mike Bloomberg y Beto O’Rourke.
A Sanders, que tiene muchos partidarios entre los jóvenes y los hispanos, lo han respaldado los ex contendientes demócratas Bill de Blasio y Marianne Williamson.
Resta saberse a quién respaldará la senadora progresista de Massachusetts, Elizabeth Warren, alguna vez favorita en los sondeos, que abandonó la carrera la semana pasada sin pronunciarse por ninguno de los dos.