El demócrata Newsom, que está en su primer mandato, ha amenazado con retener fondos a los gobiernos locales que se nieguen a cumplir las restricciones.
Las medidas enfurecieron a algunos californianos ocho meses después de la pandemia y a algunos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. Los alguaciles de los condados de Los Ángeles y Riverside han dicho que no ayudarán a imponerlos.
"La oficina del alguacil del condado de Riverside no será chantajeada, intimidada o utilizada como fuerza contra los residentes para hacer cumplir las órdenes del gobernador", dijo el alguacil de Riverside, Chad Bianco, en un mensaje grabado en video publicado en el sitio web del departamento.
California reportó más de 30,000 nuevos casos el domingo, excediendo el máximo anterior del estado de 21.986 establecido el 4 de diciembre, y marcó un nuevo récord para pacientes hospitalizados con COVID-19.
De media, en la última semana los nuevos casos en California se dispararon hasta los 15,000 diarios y las muertes han pasado de en torno a quince al día a principios de noviembre a 113 el pasado miércoles.
Estados Unidos es el país más enlutado del mundo en términos absolutos por el coronavirus con más de 280,000 muertos y 14.7 millones de contagios.
En estas últimas semanas, hubo días en los que se reportaron más de 2,500 muertos en ese país, evocando los momentos críticos de la primera ola de la pandemia.
Con información de AFP, EFE y Reuters