Brostrom resaltó que hay evidencia "suficiente" para que las autoridades danesas reaccionen, si bien añadió que Dinamarca no rechaza poder recuperar la vacuna en el futuro si fuese necesario, en caso de que la situación epidemiológica empeorara de forma notable y la sanidad estuviese presionada.
A las cerca de 150,000 personas que recibieron una dosis de esa vacuna se les ofrecería otra para su segunda dosis, según las autoridades.
El abandono de la vacuna supone una prolongación de al menos tres semanas en el programa de inmunización danés, que preveía la vacunación de todos los mayores de 16 años para el mes de julio.
Dinamarca había sido el primero en suspender el pasado 11 de marzo la vacunación con AstraZeneca, decisión que siguieron luego la mayoría de países europeos, aunque reanudaron el proceso cuando la EMA aseguró que no había evidencias de relación directa con los casos de trombosis detectados.
Algunos países han reservado sin embargo su uso para mayores de 60 años, como es el caso de Alemania, España y Suecia, mientras Noruega anunciará en unos días qué decisión tomará sobre la vacuna, suspendida también desde hace un mes.
Por su parte, Sudáfrica también renunció a ella en febrero, ya que su eficacia está en duda ante la variable que asola el país.
Estados Unidos, al igual que Suiza, todavía no la autorizaron, y Venezuela se negó a hacerlo invocando sus efectos secundarios.
Dinamarca ha registrado un muerto con ese cuadro clínico, que incluye baja cantidad de plaquetas, coágulos en vasos sanguíneos y hemorragias; y un par de casos de fallecidos con síntomas similares que aún no se habían acabado de analizar a finales de marzo.
La situación epidémica se mantiene estable desde hace un mes en Dinamarca, que la semana pasada tenía la tercera incidencia de nuevos casos más baja en los últimos 14 días, con 129.15 por 100,000 habitantes, por detrás de Islandia y Portugal.
Las autoridades danesas iniciaron en marzo una reapertura de la actividad económica y social, vinculada en gran medida a la presentación de un certificado que acredite que se está vacunado, se ha pasado el COVID-19 o se ha dado negativo en un test.
Con información de AFP y EFE