La destitución del fiscal anticorrupción causa protestas en Guatemala

Sandoval, "campeón anticorrupción"

La FECI fue establecida en 2006 como apoyo para la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un ente adscrito a la ONU. La CICIG se disolvió en 2019 cuando el entonces presidente Jimmy Morales se negó a renovar el acuerdo entre Guatemala y la ONU.

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Desde entonces, la FECI maneja los casos anticorrupción de mayor nivel. Por su labor en la organización, Sandoval ha recibido diversos premios y fue calificado como un "campeón anticorrupción" por el Departamento de Estado de Estados Unidos. Sus últimas investigaciones incluían pesquisas contra funcionarios del actual gobierno, encabezado por el presidente Alejandro Giammattei.

Semanas antes de su destitución, Sandoval ya había denunciado hostigamiento a su trabajo y falta de apoyo del gobierno. En la conferencia de prensa que se realizó ayer en la oficina del Procurador de los Derechos Humanos (PDH), afirmó: "Soy el último de los fiscales que ha sufrido por buscar la verdad".

"Temo por mi seguridad, pero más que por mi seguridad, por la estabilidad laboral del personal de la FECI, por su seguridad personal, por su seguridad jurídica y temo por la vida de mi familia", dijo en una entrevista con la cadena CNN.

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Pocas horas después de la conferencia, Sandoval abandonó el país para evitar lo que considera pueden ser represalias personales.

La decisión fue criticada Estados Unidos. El congresista demócrata Albio Sires afirmó que el despido de Sandoval "es un golpe letal a la lucha contra la corrupción en Guatemala. Si no se retira la decisión, los Estados Unidos debe designar a la AG (fiscal general) Porras bajo nuestra ley por haber interferido con las investigaciones de corrupción".

#ConsueloDeLosCorruptos: La indignación del pueblo guatemalteco

La respuesta de la población no se hizo esperar. Menos de dos horas después de la destitución de Sandoval, manifestantes se reunieron frente a la PDH. Con mensajes como "Consuelo vendida, estás despedida", "Su única función es ser #ConsueloDeCorruptos" y "Mi fiscal es Juan Francisco Sandoval", los guatemaltecos expresaron su descontento contra la decisión de María Consuelo Porras.

Andrea Rodríguez, ciudadana y periodista presente durante el movimiento, comunicó su indignación ante el despido de Sandoval: "Da un mensaje a la ciudadanía de que no se puede acceder a la justicia en este país y de que las personas que sí están realizando su trabajo dentro del Estado van a ser silenciadas, destituidas e intimidadas. Es un agravio hacia la lucha contra la injusticia".

El sábado, organizaciones estudiantiles y miembros de la población general celebraron encuentros frente al Ministerio Público para exigir la renuncia de Consuelo Porras. El Procurador de Derechos Humanos, Jordán Rodas, acudió para verificar protocolos de las fuerzas de seguridad y el respeto a los derechos de los manifestantes.

La comunidad indígena de Guatemala, que representa el 40% de su población, también se ha expresado en el interior del país. Entre los grupos se incluyen la comunidad Tz'unun Ya' en el departamento de Sololá y la Alcaldía Indígena de los 48 Cantones del departamento de Totonicapán.

La indignación se suma al enfado contra el gobierno de Giammattei, a quien se le acusa de haber robado los préstamos para comprar las vacunas contra el COVID-19. El país cuenta con un índice de vacunación de 0.2 dosis aplicadas por cada 100 personas, contra un 34.9 en Chile, líder en Latinoamérica, y un 3.1 en México.

Esta semana se amplió el grupo objetivo de vacunación gracias a las donaciones recibidas desde Estados Unidos. La población exige saber qué ha pasado con las que se comprarían a través de préstamos. Los carteles incluyen hashtags como #DondeEstaElDinero, #DondeEstanLasVacunas y #RenunciaGiammattei.