Los rebeldes publicaron un video en el que se mostraba el ataque a la prisión, con edificios destruidos, socorristas sacando cuerpos de los escombros y cadáveres mutilados en las inmediaciones.
En el comunicado de Riad, que acusa a los hutíes de "desinformación", la coalición asegura que la cárcel no aparecía en la "Lista de No Bombardeo" acordada con Naciones Unidas y "no había sido comunicada al Comité Internacional de Cruz Roja".
Más al sur, en la ciudad portuaria de Hodeida, otro ataque de la coalición internacional liderada por Arabia Saudita impactó una instalación de comunicaciones y mató a tres niños que jugaban cerca. "Al parecer, los niños estaban jugando en un campo de fútbol cercano cuando cayeron los misiles", indicó Save the Children.
La ONU y EU condenan el ataque
En un inusualmente fuerte comunicado, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, condenó "los ataques aéreos de la coalición dirigida por Arabia Saudita contra un centro de detención en Saada" y señaló que las normas internacionales prohíben los ataques a blancos civiles.