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Segunda vuelta en las elecciones de Brasil: todo lo que debes saber

Luiz Inácio Lula da Silva y Jair Bolsonaro se verán de nuevo las caras en las urnas brasileñas para definir quién será el presidente de la mayor economía de América Latina por los siguientes años.
mar 04 octubre 2022 05:04 AM
Combinación de fotos del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el expresidente brasileño, Luiz Inácio Da Silva.
"El balotaje promete ser una disputa feroz", dijo a la agencia AFP Paulo Calmon, politólogo de la Universidad de Brasilia. "Será una campaña agresiva y de bajo nivel".

Para decepción de los seguidores de Luiz Inácio Lula da Silva, al expresidente brasileño no le alcanzó su popularidad para regresar al ejecutivo en Brasil y tendrá que enfrentarse en una reñida segunda vuelta con el actual mandatario, el derechista Jair Bolsonaro.

Los días previos a los comicios la moral estaba por las nubes en las filas del candidato del Partido de los Trabajadores (PT). Había razones para ello. Varias encuestas pronosticaban un triunfo de Lula con más de 50% de los votos válidos y, por tanto, sin necesidad de una segunda vuelta.

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La realidad ha sido otra. Con 99.8% de las urnas escrutadas, Lula obtuvo 48.4% de los votos frente a 43.2% logrado por Bolsonaro.

"Tengo certeza absoluta de que la justicia divina hará que ganemos las elecciones para recuperar la dignidad del pueblo brasileño", exclamó el expresidente, que gobernó el país entre 2003 y 2010, ante unos pocos centenares de seguidores y en medio de un amplio dispositivo policial.

Una primera vuelta polarizada y violenta

La campaña para la primera vuelta de las elecciones estuvo marcada por la enorme polarización política, así como por las constantes agresiones entre los candidatos, especialmente entre Lula y Bolsonaro.

En el último debate, llevado a cabo tres días antes de los comicios por la cadena TV Globo, los dos candidatos intercambiaron insultos y acusaciones.

En su primera intervención, Bolsonaro acusó a Lula de haber sido el jefe de una "pandilla" de ladrones, durante los gobiernos de su Partido de los Trabajadores (PT) (2003-2016), incluso tachándolo de "mentiroso" y "traidor a la patria”.

Hacía referencia al escándalo de Petrobras, por el que el otrora obrero metalúrgico fue encarcelado por 18 meses en 2018 y 2019, antes de que su condena fuera anulada por la corte suprema.

Lula, que había sido criticado por eludir las acusaciones de corrupción en el primer duelo televisivo, decidió esta vez ir al ataque.

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"Si se viese en el espejo y supiese lo que pasa en su gobierno, lo que fue la pandilla de la vacuna", lanzó el expresidente, acusando a su rival de irregularidades durante la compra de antígenos contra el covid.

"El 2 de octubre, el pueblo te va a mandar a casa", agregó el izquierdista, lamentando a un presidente que "miente a toda hora, descaradamente”.

"No existe nada contra mi gobierno", espetó Bolsonaro, que siguió arremetiendo con el micro apagado, lo que le valió un llamado al orden del moderador.

El panorama para la segunda vuelta, sin embargo, no pinta para una campaña menos polarizada.

"El balotaje promete ser una disputa feroz", dijo a la agencia AFP Paulo Calmon, politólogo de la Universidad de Brasilia. "Será una campaña agresiva y de bajo nivel".

¿Cuándo será la segunda vuelta de elecciones?

La segunda vuelta está prevista para el domingo 30 de octubre, cuatro semanas después de la primera vuelta.

¿Qué se necesita para ganar?

La segunda vuelta se define por una mayoría simple de votos. O sea, quién más sufragios obtenga, será declarado presidente electo de Brasil.

La ventaja de cinco puntos dejó la definición abierta y proyecta semanas de una campaña intensa y agresiva en un país profundamente dividido.

La agencia de calificación Moody's dijo que los resultados de las elecciones de Brasil del domingo indican una carrera ajustada en la segunda vuelta entre Bolsonaro y Lula.

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"Los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales en Brasil sugieren una carrera reñida en la segunda vuelta. También dejaron claro que el próximo gobierno seguirá lidiando con un Congreso demasiado fragmentado como para avanzar en una agenda de reformas", dijo Samar Maziad, analista senior de Moody's Investors Service.

"Independientemente de quien gane el segundo turno, va a tener que gobernar con un Congreso más orientado a la derecha, más liberal y promercado, con un gran peso", dijo el economista Igor Macedo de Lucena.

Leandro Consentino, politólogo del instituto Insper, pronostica un "final abierto" y "una situación pareja" para ambos, con Bolsonaro mostrando fuerza en estados claves como Rio de Janeiro, Sao Paulo y Minas Gerais, en el sudeste de Brasil y que reúnen 40% del padrón electoral.

Cuestionamientos y acusaciones

Antes de la elección de este domingo, Bolsonaro había hecho repetidos ataques sin fundamento sobre la integridad del sistema de votación electrónica de Brasil. El presidente ha agitado la posibilidad de un fraude sin aportar pruebas. Algunos analistas temen que no reconozca una eventual derrota.

"Los resultados de las urnas serán respetados siempre y cuando las elecciones sean limpias y transparentes", dijo el líder ultraderechista durante la campaña.

El presidente dijo que espera un posicionamiento de las fuerzas armadas sobre la transparencia de las elecciones, tras poner en duda la fiabilidad del voto electrónico.

Durante la jornada electoral se vitalizaron en redes varias noticias falsas que daban eco a este tipo de acusaciones. Uno de los mensajes decía lo siguiente: "EL TSE (Tribunal Superior Electoral) redujo el número de urnas para los brasileños que viven en el exterior y lo aumentó en las cárceles. Cada quien que saque sus conclusiones”.

De acuerdo con una ley de 2010, las cárceles brasileñas reciben urnas electorales para los presos elegibles para votar.

Pero este domingo, de hecho, envió menos que en las últimas elecciones generales en 2018: 222, frente a 233 hace cuatro años, según el TSE. De su lado, el número de urnas desplegadas a los votantes en el exterior pasó de 744 a 1,018 en ese periodo.

Otro rumor que se viralizó antes de la primera vuelta aseguraba que las autoridades habían decomisado tres urnas electrónicas ya "programadas con al menos 81% de votos para Lula" en la ciudad de Serafina Correa, en el estado Rio Grande do Sul, sureste.

"Es un golpe contra Bolsonaro y un crimen contra sus seguidores", rezaba el mensaje, que citaba a una radio local como fuente de la “noticia".

Una foto que acompañaba la publicación mostraba a la policía inspeccionando un vehículo del TSE con cajas de cartón, cada una identificada como "urna electrónica”.

Pero una búsqueda reveló que esas imágenes en realidad correspondían a un control rutinario de vehículos en el estado de Amazonas (noroeste) en 2018. La policía estatal dijo entonces que no se encontró nada irregular. La radio local citada como fuente de la información negó la historia.

De acuerdo con los observadores internacionales, se trató de unas elección libres.

La Casa Blanca dijo el lunes que la información indica que las elecciones de Brasil del fin de semana fueron "libres" y “justas”.

"Felicitamos al pueblo y a las instituciones de Brasil por la celebración de una exitosa primera ronda electoral y apoyamos su libre ejercicio del derecho a elegir a su próximo líder", dijo a la prensa la portavoz Karine Jean-Pierre.

Toda la información disponible indica que las elecciones se celebraron de forma "libre, justa, transparente y creíble", sostuvo. "Compartimos la confianza de Brasil en que la segunda (vuelta) también se llevará a cabo de la misma manera”.

Con información de AFP, EFE y Reuters

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