"Esta denuncia lo que persigue es desestabilizar al país, es contraria a la Constitución”, declaró Torres a la prensa luego de una reunión del Consejo de Ministros.
El expresidente del Tribunal Constitucional Óscar Urviola declaró al diario La República que la denuncia "tiene elementos para que el Congreso califique la conducta del presidente como permanente incapacidad moral, que lo inhabilita para seguir en el cargo”.
Castillo acusa un “golpe de Estado”
Desde su llegada al poder, Castillo ha vivido bajo el cerco de la fiscalía y el asedio de un Congreso, dominado por la derecha, que exige su renuncia e intentó en dos ocasiones destituirlo.
En una rueda de prensa con periodistas extranjeros, el mandatario calificó la denuncia constitucional —así como los allanamientos y detenciones— como un "golpe de Estado" orquestado por la Fiscalía General.
"El día de hoy en horas de la mañana se ha iniciado la ejecución de una nueva modalidad de golpe de Estado en el Perú, un golpe de Estado con libretos creados utilizando al Ministerio Público políticamente y (para) hacer creer al país que mi persona lidera una red criminal", denunció el presidente.
En la que fue su primera rueda de prensa desde que asumió el poder, Castillo sostuvo que cuando recorre el interior del país el pueblo le dice que cierre el Congreso, pero que él es "un demócrata". Además, manifestó que "Nosotros vamos a garantizar la estabilidad económica y dar plena confianza a los inversionistas”.
Pero "nos vamos a mantener firmes a pesar de esta persecución política", agregó en la rueda de prensa. "Están fundamentando una acusación que jamás hemos cometido", afirmó.
Con información de AFP y Reuters