Rusia tomó sus "distancias" del consenso al calificar algunas partes del texto de "totalmente inaceptables”.
Para el canciller de Chile, Alberto van Klaveren, el texto adoptado es "esencial para la gobernanza océanica, basada en la justicia y la inclusión", mientras que para Venezuela se trata de una "victoria para los países y los pueblos del sur”.
Para México, en tanto, significa un "compromiso por el estado de derecho internacional”.
El diplomático cubano Yuri Gala López, que habló en nombre del Grupo de los 77 más China, resaltó la "batalla" que libraron los países del sur para incluir algunos aspectos claves del acuerdo, finalizado en marzo tras más de 15 años de negociaciones.
¿En qué consiste en tratado?
Con buena parte de los océanos del mundo fuera de las zonas económicas exclusivas (ZEE) de los países, y por tanto de la jurisdicción de cada estado, crear una protección para la altamar requería de la cooperación internacional.
El acuerdo crea un marco legal para extender las franjas de protecciones ambientales hacia aguas internacionales, que abarcan más del 60% de los océanos del mundo. Hasta ahora, la altamar estaba gestionada bajo una serie de acuerdos y organismos internacionales sin una jurisdicción clara, sin demasiada coordinación y con unas normas inadecuadas para su protección.
El nuevo tratado se establecerá en el marco de la ya existente Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar y busca "asegurar la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica marina de las zonas situadas fuera de la jurisdicción nacional".