La formación en su esencia es sacar lo mejor de las niñas, jóvenes y adultos. ¿Cómo impulsar esto desde la televisión, la radio, la computadora, el internet? Si el enfoque es seguir los viejos paradigmas con nuevas tecnologías, seguiremos estancados en la edad de Gutenberg con un impulso de celular al estilo Steve Jobs.
La realidad educativa vive una etapa de disrupción en la cual los educadores, educandos e instituciones educativas tienen la necesidad de desarrollarse exponencialmente. Esto implica aprovechar el momento de crisis para enfocarse en el futuro de la nueva educación: salir de la zona de confort, establecer zonas de crecimiento y aprendizaje continuo.
En esta nueva educación destacan las carencias vigentes del sistema educativo mexicano: dependencia de la enseñanza por parte de un experto que es maestro versus la independencia de investigar y aprender en forma autónoma. Aislamiento de la conectividad a nuevas tecnologías para un 30% de mexicanos versus el uso deficiente y despilfarrado del 70% de este medio enfocándose en utilizarlo para distracción la mayor parte del tiempo.
La delegación del adiestramiento en instituciones públicas y privadas versus el trabajo de padres de familia en el acompañamiento de sus hijos en aprender. La distribución deficiente de los tiempos personales en acciones: laborales, familiares, sociales y personales en un mundo que se acelera y nos obliga a correr sin plantearse un plan, un sentido de vida.
La Educación Híbrida esboza generar una nueva zona de aprendizaje. Por una parte, trazar nuevas experiencias de auto crecimiento en familia y con las amistades en espacios presenciales. Lograr un balance en la salud corporal con la combinación de ingesta de alimentos sanos, ejercicio, convivencia y meditación personal.
Experimentar una clase de cocina guiados por una receta de internet y una videoconferencia en el celular. Utilizar las cuentas del agua, luz, teléfono, súper, para generar un presupuesto familiar y generar desde una aplicación, un análisis financiero sobre: gastos del año pasado, avance de presupuesto familiar al día y metas de cierre para el año.
Buscar un equilibrio emocional, de tolerancia, resiliencia, fortaleza aun estando entre cuatro paredes. Sentirse libre, con sentido de vida y capaz de seguir laborando auxiliado por la voz, la imagen y la comunicación con los compañeros de trabajo.