Trabajar desde casa requiere de una planeación diferente para equilibrar vida personal y trabajo. Establecer límites a las distracciones, pero también a las tareas de trabajo. Es importante establecer horarios de inicio y de fin de las jornadas. Es recomendable mantener la comunicación con nuestros reportes directos, colegas y quienes nos reportan para estar presentes y activos en nuestro entorno laboral.
Trabajar desde una posición remota puede dar una sensación de aislamiento. Utilizar las videollamadas sirve como una herramienta para sentir mayor contacto y motivación para vestirse en un estilo profesional. Para mostrar la misma productividad que se tenía de manera presencial se deben comunicar los retrasos en entregas y continuar participando en equipos de trabajo.
Hemos visto ya la implementación del formato de tres días en oficina, dos días de manera remota y dos días de descanso. Este esquema híbrido también representa retos que las empresas nos han señalado en orden de prioridad: retención de personal, conservar la cultura organizacional, seguridad de la información, colaboración y construcción de equipos y contratación de nuevos colaboradores e inducción a la empresa. (Talent Solutions -2021).
Las ventajas de este esquema es que nos permite volver al contacto con nuestros colegas y rompen la rutina frente a la computadora.
Atraer, retener e involucrar al talento requiere de un enfoque holístico. Hemos aprendido a amar lo mejor de los dos mundos, la flexibilidad del trabajo remoto y la energía de las interacciones personales. La tecnología nos facilita la colaboración, pero los colaboradores hoy demandan empleadores que se preocupen por su salud y bienestar, que ofrezcan planes de carrera y crecimiento profesional, oportunidades de aprendizaje y que los valores de las organizaciones coincidan con las causas que los motivan.
