La realidad es que en los últimos años se ha visto un crecimiento vertiginoso de las inversiones y operaciones con criptodivisas, y el pronóstico es que éstas sigan en aumento e impacten fuertemente en el desarrollo del sistema financiero en los próximos años.
Al respecto, se estima que la economía del metaverso llegue a los 758,000 millones de dólares para el año 2028 . Asimismo, se proyecta que para el año 2030 Ethereum alcance un valor de 20 billones de dólares y que este blockchain tenga un mayor flujo económico que la gran mayoría de los países.
Como podemos notar, los indicadores son muy fuertes y todos apuntan a un crecimiento agresivo y a una adopción masiva de estas tecnologías. Por este motivo, considero que es fundamental y urgente que en México se comience a prestar atención al mercado de las criptomonedas ya que es el futuro del Internet, un Internet descentralizado y con alto grado de transparencia.
Ya quedaron atrás los tiempos en que las criptomonedas eran propiedad exclusiva de arriesgados inversores individuales. Hoy en día, muchas empresas de todo el mundo se hacen de bitcoins y de otras criptodivisas para que su capital no pierda valor e, incluso, se rentabilice.
Así lo demuestra un estudio elaborado sobre la base de una encuesta llevada a cabo por Okta , la cual se realizó para conocer cómo las principales empresas del mundo se transforman con la tecnología. Para la misma se entrevistó a 1,050 ejecutivos de distintas industrias globales con más de 1,000 millones de dólares de ingresos al año y más de 50,000 empleados. El 61% de los ejecutivos encuestados aseguró que la tecnología de los criptoactivos se encuentra entre las inversiones de la estrategia de transformación digital de las organizaciones que representan.
Retomando al escenario que tenemos en México, reconocemos que muchos empresarios mexicanos saben que la transformación tecnológica es inevitable y que de a poco empiezan a ver estas tecnologías como aliadas. Sin embargo, el problema radica en que muchos de ellos desconocen cómo hacerlo, o bien, presentan resistencia al cambio, lo que es un grave error ya que entre más posterguemos la adopción, más atrasados estaremos en nuestra capacidad de sentimiento y uso de estos sistemas.