Pero esa época dorada, en la que todos los indicadores iban hacia arriba, está cambiando. No es que la industria esté en crisis o que haya dejado de crecer, sino que a partir de 2022 (y al menos la primera mitad de 2023) el contexto inflacionario ha impactado de tal manera que el crecimiento ahora viene acompañado de desafíos mucho más complejos. Ante esto la pregunta obvia es, ¿cómo crecer en tiempo de crisis?
Para responder hay que remontarnos a inicios de la pandemia, donde la industria logística en México era buena; sin embargo, no estaba preparada para el ‘boom’ del comercio electrónico. La demanda de entregas a domicilio se disparó de una forma exponencial. ¿Cómo respondieron las empresas? Con infraestructura y tecnología. Ese fue el combo ganador de la pandemia.
La disrupción se apoderó de muchas áreas de la industria (de logística y otras) y así se pudo responder ante el pico de demanda. La palabra ‘disrupción’ se apoderó del lenguaje de los empresarios, se posicionó en los medios y muchos especialistas hablaban de ella como la panacea para la pandemia.
Pero ahora, ante un contexto con un menor crecimiento y retos verdaderamente complejos en la cadena de suministro, no podemos pensar que la respuesta del sector será la misma. Ante un problema diferente, se requiere de una solución diferente. Así de sencillo.
Ante un dilema
¿Pero, cuál es esa solución? Luego de la adopción tecnológica abrupta, las compañías comienzan a cuestionarse el verdadero significado de disrupción. Hasta hace poco tiempo se entendía como empresas cuya tecnología les permitía abrir nuevos paradigmas y resolver problemas de forma creativa y novedosa. Ahora la disrupción debe ir más allá e incorporar en esta definición el papel de la fuerza de trabajo, es decir, de los colaboradores de una compañía.
En este contexto prevalece el dilema si la prioridad para los nuevos modelos de negocios debe enfocarse en adoptar tecnologías o bien concentrarse en buscar profesionales calificados y capacitados para estar a la altura del crecimiento del sector.
Más allá de la tecnología
Aunque el uso de tecnologías innovadoras, como los drones o la inteligencia artificial le dan una mayor visibilidad e importancia a la logística, el equipo de trabajo es quien diseña y ejecuta estrategias de forma creativa y novedosa.
La tecnología es y seguirá siendo parte importante de la disrupción, pero los disruptores logísticos deberán ver más allá y rodearse, no solo de la mejor tecnología, sino también del mejor equipo.
