En medio de la escasez global de chips que ha dejado inactivas algunas fábricas de vehículos, el presidente ejecutivo de Intel, Pat Gelsinger, confirmó que su compañía se encuentra en conversaciones con empresas que diseñan chips para automóviles para iniciar la producción de semiconductores, los cuales podrían estar listos en un periodo de seis a nueve meses.
Durante una reunión con funcionarios de la Casa Blanca, Gelsinger dijo que Intel abrirá su red de fabricación a las empresas de chips para autos, con el objetivo de brindar ayuda inmediata ante la escasez que ha interrumpido las líneas de ensamblaje de Ford y General Motors.
“Esperamos que algunas de estas cosas se puedan aliviar, no requiriendo una construcción de una fábrica en tres o cuatro años, sino tal vez seis meses de nuevos productos certificados en algunos de nuestros procesos existentes. Ya hemos comenzado esos compromisos con algunos de los proveedores de componentes clave”, dijo Gelsinger a Reuters.