La prisión federal ADX Florence en Colorado, lugar donde Joquín el Chapo Guzmán fue sentenciado a cadena perpetua, es considerada la cárcel más segura de Estados Unidos y la única catalogada como Supermax o de máxima seguridad, pues se encarga de darle un control extremo a los reclusos violentos o peligrosos.
En la ADX Florence, los reclusos permanecen aislados durante 23 horas al día en pequeñas celdas solitarias, la hora del día restante es para hacer ejercicio en una jaula ubicada en el patio y la comida se entrega a través de una ranura en la puerta de su celda.