Para la obtención de los dispositivos, el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio llevó a cabo el proyecto de Medalla de Tokio 2020, donde se pidió al público japonés que donara los aparatos que ya no utilizara.
De las 78,900 toneladas de dispositivos recolectados, se extrajeron 32 kilos de oro, 3,500 kilos de plata y 2,200 kilos de bronce.
Tan solo de teléfonos móviles se reunieron 6.21 millones de aparatos, provenientes de las 1,741 ciudades de Japón, donde más del 90% de ellas participaron.
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"Los recursos de nuestra Tierra son limitados, así que reciclar estas cosas nos hará pensar en el medioambiente", dijo en 2017 Koji Murofoshi, director deportivo de Tokio 2020, durante l a convocatoria para reunir los aparatos.
Su diseño corrió a cargo del japonés Junichi Kawanishi, quien fue seleccionado entre otros 400 participantes.
Las medallas se asemejan a piedras ásperas y rugosas que han sido pulidas, reflejando el concepto de que, para alcanzar la gloria, los deportistas tienen que esforzarse a diario por la victoria.
Kawanishi espera que “las medallas sean vistas como un homenaje a los esfuerzos de los atletas, reflejando su gloria y simbolizando la amistad”.