En un escenario de incertidumbre provocado por la pandemia del Covid-19 el gobierno mexicano debe tomar medidas para garantizar ingresos a las familias que dependen del sector informal, así como generar condiciones para que los empleados formales conserven su empleo, aseguró en entrevista Santiago Levy, exsubsecretario de Hacienda y arquitecto del programa social Progresa Oportunidades.
El gobierno debe garantizar el ingreso de los trabajadores, dice Santiago Levy
“Lo más importante es tratar de que la pandemia sea lo más corta posible y para lograrlo lo primero que necesitamos es que las medidas de aislamiento sean respetadas por la mayor parte de la población”, explicó.
Para los trabajadores informales es urgente hacer algo que les permita no trabajar. Esto no se logra con transferencias para los jubilados, tampoco con becas educativas. Necesitamos nuevos programas, dijo quien también fuera director general del IMSS y economista en Jefe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Levy tiene un panorama claro al momento de mencionar los detalles en el actuar de las autoridades: “Va a ser importante ayudar a las empresas a subsidiar parte de la nómica y también posponer parte del pago de impuestos, distribuirlo en más tiempos y, también, facilitar el acceso el crédito”.
El doctor en Economía por la Universidad de Boston es consciente de que el Gobierno enfrenta fuertes restricciones presupuestales para poder lanzar un programa de rescate ambicioso.
¿De dónde obtener recursos?, se le cuestiona: “Lo que hay que hacer es adaptarse a una realidad que ya está aquí: la meta de superávit primario no se va a cumplir, la recaudación va a caer fuertemente en lo que resta del año, sobre todo en este trimestre abril-junio. Debemos entender que este año estamos viviendo una situación inédita. Ya en el 2021 podemos regresar a fortalecer las finanzas públicas.
Propongo que haya un endeudamiento extraordinario en el 2020 pero que se anuncie que en algún momento de 2021 va a haber una contribución extraordinaria que todos los mexicanos vamos a tener que pagar para sufragar la deuda”.
Levy añade que la banca de desarrollo puede ser de utilidad para que los bancos comerciales entreguen financiamientos. “Los bancos van a enfrenar más riesgo, entonces lo que se requiere es aumentar las garantías”.
¿Qué sectores se verán más afectados?
Por diferentes razones casi todos. Va a afectar claramente el turismo porque el flujo se va a reducir notablemente y todos los lugares turísticos –Cancún, Puerto Vallarta, Acapulco- van a tener problemas muy graves. La industria automotriz va a tener problemas porque las cadenas de suministro se van a afectar. También los servicios en las zonas urbanas, fundamentalmente restaurantes, cines, bares; muchísimas actividades van a ser afectadas.
La actividad económica en el medio rural en gran medida puede continuar porque esa actividad no requiere la aglomeración de personas.
¿De dónde obtener recursos?
Se podría acomodar parte del gasto en las transferencias para empresas y trabajadores informales, parte se puede hacer a través de más deuda y parte, en mi opinión, se debería hacer posponiendo, no suspendiendo, ciertos proyectos de infraestructura pública.
No es que ya no vayamos a hacer el aeropuerto (Felipe Ángeles), o no es que no vamos a hacer el Tren Maya o la refinería (Dos Bocas). Durante el 2020 vamos a bajarle el ritmo a esas obras, lo más que se pueda, y ese dinero lo vamos a utilizar para combatir la pandemia.
¿Y Pemex?
Hay dos cosas diferentes. No podemos tener una situación donde los bonos de Pemex contaminen los bonos de México, sobre todo en un contexto en el que, probablemente, México tenga que salir a los mercados a buscar más recursos.
Eso es diferente de los proyectos de infraestructura de Pemex. Para estos mi sugerencia es que se pospongan, no suspender, no cancelar. Sobre esta controversia, si sí o si no, discutamos esto es el 2021.
¿Cómo preparar un paquete económico equilibrado para 2021?
Nadie sabe porque nadie sabe si el virus se va a controlar en tres meses o cinco; nadie sabe si el virus va a mutar o no; nadie sabe si la reactivación de los trabajadores va a ser rápida o lenta. Hay que haces es estar alerta, ajustando la política económica en función de lo que lo que vaya pasando en los próximos tres meses.
Lo más importante es, señalar desde ahorita el compromiso de apoyar a los trabajadores formales e informales y evitar la quiebra de empresas formales.
Con qué mezcla de más endeudamiento o cambio en la composición de gasto lo podemos ir ajustando, pero hay que tener claridad en que es lo prioritario: que los trabajadores informales tengan ingresos y que los trabajadores formales no pierdan el suyo.