El presidente Andrés Manuel López Obrador no ocultó sus diferencias con la Comisión Reguladora de Energía (CRE) desde el inicio de su gestión. Un proceso que ha resultado en la renuncia y sustitución de varios comisionados. La más reciente es la del presidente del organismo regulador, Guillermo García Alcocer.
El primer golpe vino en el presupuesto. El gobierno redujo 30% el monto destinado a la Comisión para 2019. Este movimiento orilló al despido de 367 colaboradores, dos terceras partes del organismo regulador, a inicios del año.
La relación de García Alcocer con la administración de López Obrador se tensó aún más por una acusación directa sobre posibles conflictos de interés del comisionado presidente. El presidente señaló al comisionado presidente por conflictos de interés en varias autorizaciones a permisionarios.