Este año el temido "donut" —o bono cero— casi se da por hecho y algunos bancos estudian recortes de empleos para capear la crisis sanitaria, lo que no sorprende teniendo en cuenta que las esperanzas prepandémicas de operaciones multimillonarias se han esfumado.
"Es como una selección darwiniana", dice un asesor "senior" de un banco de Wall Street. "Si eres un banquero 'senior' y no logras ni un solo 'pitch' (propuesta), solo puedes culparte a ti mismo. Has fallado en el cultivo de tus relaciones y ahora es evidente para todo el mundo".
La falta de contacto presencial no solo pone de manifiesto las deficiencias de algunos empleados de alto nivel. También dificulta que los asociados 'junior' aprendan y progresen, según explican cazatalentos, abogados y banqueros.
"Los banqueros 'junior' enfrentan viejos problemas —jornadas largas, carga de trabajo excesiva y falta de reconocimiento— pero este confinamiento los ha agudizado", dice Anna Marietta, cofundadora y socia directora de la empresa cazatalentos Vici Advisory. "Los jóvenes (...) necesitan ver cómo sus gerentes manejan las relaciones con los clientes y resuelven problemas".