Ciberataques
El tercer tema sobre la mesa serán los ciberataques que ha sufrido Estados Unidos en los últimos meses, detalló Psaki.
Recientemente, Darkside, un grupo de ciberdelincuentes supuestamente vinculados a Rusia, obligó a suspender operaciones durante varios días a la mayor red de oleoductos del país, Colonial Pipeline, y, en 2020, varias agencias del gobierno y grandes compañías fueron atacadas a través del programa SolarWinds, un suceso del que Washington responsabiliza a Moscú.
El futuro del desarme nuclear
Más allá de las confrontaciones, la cumbre podría servir para definir el futuro del desarme nuclear, destacó Psaki.
Ya en su primera conversación telefónica en febrero, los dos líderes acordaron prorrogar el último tratado de desarme nuclear vigente entre Rusia y Estados Unidos, el Nuevo START, y que el antecesor de Biden, Donald Trump, amenazó con abandonar si China no se integraba en el acuerdo, algo que ese país rechazó.
Ginebra fue también en 1985 el escenario de una cumbre entre el entonces presidente estadounidense, Ronald Reagan, y el dirigente soviético, Mijaíl Gorbachov, quienes en 1987 firmaron el tratado para la eliminación de misiles nucleares de medio y corto alcance (INF), del que Trump se salió en 2019.
La cumbre ha sido iniciativa de Biden, quien en abril pasado propuso a Putin durante una llamada telefónica reunirse próximamente en un tercer país, a lo que el Kremlin respondió positivamente.
Posteriormente, ha habido varias reuniones de alto nivel para preparar el encuentro, incluyendo una cita la semana pasada en Reikiavik entre los titulares de Exteriores de ambas naciones, Antony Blinken y Serguéi Lavrov.
La cumbre entre Putin y Biden se producirá al final del primer viaje al extranjero del mandatario estadounidense, quien tiene previsto viajar en junio a Reino Unido para asistir a la reunión del G7 y luego se trasladará a Bruselas, donde participará en una cumbre de la OTAN y en un encuentro con la UE.
Con información de AFP, EFE y Reuters