Además prohíbe tratar las solicitudes que no se presenten en un puerto de entrada y endurece los requisitos para pasar las llamadas entrevistas de miedo creíble, que evalúan si existe una posibilidad de que la persona sea perseguida o torturada si regresa a su país. En cualquier caso el aspirante debería pagar 50 dólares por solicitud.
Autoriza asimismo que se detenga a las familias migrantes en centros de detención hasta que un juez migratorio dirima sus casos.
En cuanto a las deportaciones, los republicanos aprueban que los migrantes puedan ser expulsados a un país que no sea el de su nacionalidad ni el último en el que hayan residido.
En el ámbito económico solicita que se cree un sistema electrónico para que las empresas verifiquen si los trabajadores tienen permiso de trabajo.
Los republicanos llevan meses en pie de guerra contra el fentanilo, principal causa de la muerte por sobredosis de 107,735 personas desde agosto de 2021 hasta agosto de 2022.
"Crueldad"
Y lo ha reflejado en el proyecto de ley, que da un plazo al gobierno para presentar un informe en el Congreso sobre qué carteles mexicanos pueden ser calificados de organización terrorista extranjera.
El congresista demócrata Jerrold Nadler afirmó que el proyecto de ley impediría incluso pedir asilo al disidente ruso Alexéi Navalni si toma un vuelo hacia Estados Unidos y su avión se ve obligado a repostar en otro país.
Su colega demócrata Verónica Escobar acusó a los republicanos de no querer "ningún tipo de inmigración" y de creer que "la crueldad es un elemento disuasorio eficaz".
Pese a la probabilidad de que quede en letra muerta, el texto podría usarse de punto de partida para eventuales negociaciones entre partidos sobre la reforma migratoria, una asignatura pendiente desde hace décadas.
La semana pasada, un grupo de senadores presentó un proyecto de ley respaldado por republicanos y demócratas moderados que vendría a prolongar el Título 42 (reformulado) durante dos años independientemente de cualquier emergencia de salud pública.