(Expansión) – La primera renuncia de un funcionario de gran calibre ya se hizo presente en la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador. La salida voluntaria, aunque presionada, del secretario de Hacienda introduce incertidumbre en el futuro económico inmediato en el país. Ojalá y ello no represente el inicio de la caída de los alfileres que sostienen a la economía
Si la llegada de AMLO a la presidencia no detonó la estampida de capitales que se esperaba––dado su persistente discurso antimercado––fue precisamente por la incorporación de piezas clave en el quehacer de la política económica, en particular en la cartera fiscal.