El ahorro debe ser un hábito constante, disciplinado, consciente y de largo plazo; no importa la edad o condición socioeconómica de cada ahorrador, siempre hay espacio para guardar algo de dinero en nuestros ahorros e ir juntando un capital.
Se puede ahorrar con diferentes fines, por ejemplo, el llegar a tener un patrimonio de determinada cantidad, para tranquilidad por si se presentan épocas adversas, un viaje, la compra de un coche, pago de estudios escolares, entre muchas otras.
En datos de la ENIF, solamente el 14% de los mexicanos ahorra de manera formal, un dato muy bajo y que se requiere incrementar de forma importante, ahí es donde entra la importancia de la Inclusión y educación financiera.
Existen muchas formas de ahorrar, diferentes instrumentos, medios que ofrecen diferentes riesgos y retornos o ganancia por estos ahorros.
Si pensamos en un ahorro 100% seguro están los CETES, pero en esta época en especifico, el rendimiento es mínimo, ya que la inflación se ubicó en el dato de la primera quincena de agosto, en el 3.99% y la tasa de CETES a 91 días, en su cotización al 18 de este mes, en 4.45%, es decir, que el rendimiento real no llega ni a medio punto porcentual; en este sentido, los CETES lo que realmente nos ayuda a lograr es el valor adquisitivo de nuestro dinero en el año.
En diferentes bancos, se ofrecen ahorros a plazo fijo con tasas superiores a los CETES, incluso ofrecen la posibilidad de realizar ahorros a través de sus aplicaciones. La mayoría de los bancos grandes como CitiBanamex, BBVA, Banorte, HSBC, Santander, etcétera, ofrecen tasas de intereses de entre 5.65% y 6.30%.
Al considerar formas de ahorrar, debemos analizar el acceso al dinero que podamos tener en un momento dado, algunas son convertibles en efectivo fácilmente y sin costos, otras no tan fácil y pueden llevar penalizaciones por solicitar el dinero antes del tiempo especificado; hay que contemplar las comisiones que pueden llegar a cobrarnos a fin de determinar la tasa real a ganar.