Ciertamente, la aceleración digital provocada en gran medida por la pandemia del COVID-19 generó que en nuestro país la falta de talento especializado en tecnologías de la información (TI) tenga un déficit de más de 50,000 programadores con buenos conocimientos y habilidades . Se convierte en un enorme problema, ya que sin suficiente abasto de programadores capacitados y actualizados en las tecnologías más recientes tendremos un rezago en el desarrollo de tecnología e innovación.
Entonces, frente a este panorama, ¿qué medidas tomar? Antes que nada, lo primero es reconocer de forma nacional y empresarial que el desarrollo tecnológico e innovación es la ruta más rápida y directa para la generación económica. Lo primero que se debe hacer es un trabajo en conjunto entre el Gobierno y el sector empresarial: crear programas educacionales que democraticen el aprendizaje en materia de programación e ingeniería.
En segundo lugar, precisamente, debemos iniciar desde la base educacional con los más jóvenes. Según la firma Evans Data Corporation, menos del 1% de la población mundial sabe programar y esto hoy representa una cuestión de Estado en muchísimos países. Sin embargo, ya son más de 20 los que incluyen la programación a lo largo de toda la currícula obligatoria. México también debe empezar a hacerlo.
No debemos olvidar que los niños pueden comenzar a programar funciones sencillas desde los seis años. Por lo tanto, se pueden crear dinámicas de participación pública en donde los programadores puedan expresar su creatividad y proponer soluciones para empresas y gobierno.
Cabe destacar que, según el último Informe sobre el Futuro del Empleo del Foro Económico Mundial, lanzado en octubre de 2020, se estima que en el mundo se generarán 150 millones de nuevos empleos tecnológicos durante los próximos cinco años.
Respecto a áreas de mayor migración, ponen énfasis en trabajos relacionados con Desarrollo de Productos y Datos e Inteligencia Artificial que estarán en constante evolución dentro del mercado laboral. Además, es un mercado de permanente cambio, por lo que, si los colaboradores son capaces de desarrollar la habilidad de aprender de manera permanente, con una actitud laboral flexible y que se adapte a estos cambios, estas áreas representarán una gran oportunidad.