Pero en 2022 y 2023 la historia dio un giro inesperado: una de un invierno cripto que ha visto caer a criptomonedas, traders y hasta países enteros (sobre todo, aquellos que se dedicaban fuertemente a la minería) en cuestión de meses. Tras esos desplomes bursátiles cada vez se cuestiona más si estamos frente a la criptoextinción, ¿será?
Otra 'criptolocura' es posible
En medio de la criptolocura de 2021 y el criptoinvierno de 2022 estos activos digitales fueron noticia a diario: la aparición de alguna cartera novedosa, la decisión de algún país de aceptarlo como moneda legal en curso y, por supuesto, los grandes fraudes de estafadores que aprovecharon el entusiasmo para timar gente. Posterior a eso pareciera que ya desaparecieron por completo.
Pero la realidad es otra. Poco a poco, a lo largo de los últimos 12 meses, las criptomonedas más fuertes se han apreciado y proyectos muy sólidos de reconfiguración de cadenas de bloques y de carteras digitales han irrumpido en la industria. En la medida que hay menos ruido alrededor del sector, se ha empezado a entrever otro tipo de criptolocura, una mucho más mesurada y, sobre todo, más alejada de las personas que se quieren hacer millonarias sin trabajo y a costa de otros.
La promesa de la seguridad
La tecnología detrás de las criptomonedas es una que las hace invaluables; tal vez, por ello mismo se han prestado a volverse vehículos de especulación en distintos puntos de su existencia. No obstante, las cadenas de bloques presentan una forma de conectar a usuarios, instituciones financieras y comerciantes (básicamente cualquier persona en el planeta), mediante transacciones seguras y complementamente rastreables y comprobables.
Paralelamente, el uso de criptomonedas también permite que se articulen entornos de confianza absoluta entre personas que necesiten hacer transacciones con la tranquilidad de que no estén a expensas de posibles ataques o vulnerabilidades digitales. En un entorno financiero constantemente bajo acecho de fraudes y estafas, la promesa de la seguridad de las criptos les da aire y vida de cara a un futuro promisorio.