Jersón, ocupada y luego parcialmente liberada
Al inicio de la invasión, la región de Jersón, conocida por su agricultura, había sido ocupada casi en su totalidad por las fuerzas rusas.
Pero una contraofensiva ucraniana permitió en noviembre de 2022 repeler al ejército ruso y recuperar la capital regional homónima.
Gracias al río que actúa como frontera natural, el frente se ha mantenido relativamente estable desde entonces y Ucrania mantiene el control de sus principales centros urbanos. Lo mismo sucede en la vecina Zaporiyia.
Las tropas rusas controlan aproximadamente el 71% de la región de Jersón, de acuerdo con el ISW.
Zaporiyia, región nuclear
Los soldados rusos están presentes en el 74% de Zaporiyia, según la misma fuente.
Desde las primeras semanas del conflicto, controlan la central nuclear homónima, la más grande de Europa. Si bien esta fue cerrada, su seguridad se considera precaria porque se encuentra muy cerca de los combates.
Rusia y Ucrania se acusan mutuamente de tenerla en el punto de mira.
Sumi y Járkov, casos especiales
Además de los territorios cuya anexión reclama Rusia, sus tropas realizan incursiones en las regiones de Sumi y Járkov, en el noreste.
Pese a los frecuentes bombardeos, Moscú no controla ninguna urbe importante y solo está presente en el 5% de Járkov y en el 1% de Sumi, según el análisis de los datos del ISW.
El Kremlin afirma que quiere crear una "zona de amortiguación" para impedir ofensivas ucranianas en Rusia, como la que se produjo en el verano de 2024 en la región oriental de Kursk.