El panorama está lleno de incertidumbres, por lo que es inevitable pensar qué es lo que sucederá con el sector ante el impacto económico causado por la pandemia, ¿serán las fintech la respuesta para mitigar los efectos negativos y reactivar la economía?
Sin embargo, con una desaceleración económica y el riesgo de una recesión, las fintech que no tengan suficiente planeación y capital no van a sobrevivir. En situaciones normales, el mal manejo del capital es una de las principales causas del fracaso de las empresas en términos generales, por lo que no es de sorprendernos que quienes no cuentan con una planeación estratégica sostenible en su modelo de negocio o carezcan de capital necesario para continuar innovando, no lograrán superar la situación.
Las fintech se verán obligadas a transformarse y reinventarse a través de una creación destructiva schumpeteriana, es decir, modificando su estructura económica desde dentro, destruyendo las viejas prácticas y creando nuevas.
Las empresas que cuenten con una mejor gestión de recursos tendrán oportunidad para crear nuevos productos fuertes y sin presión del crecimiento, aprovechando la crisis como impulso y atendiendo nuevos mercados. También representa una gran oportunidad de afinar su estrategia, los números y trabajar en todos los proyectos que van a llevar a la firma al siguiente nivel.
Efectivo contra innovación
Uno de los aspectos más problemáticos que vive cualquier emprendimiento en contextos de crisis es la falta de liquidez. Esto es especialmente importante en las fintech, quienes tienen la necesidad de recurrir a nuevas rondas de financiamiento para mantener su crecimiento.