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Nokia, de vender emblemáticos celulares a destacar en telecomunicaciones

La compañía finlandesa tuvo un lugar privilegiado en la industria de los móviles, pero no logró mantenerse actualizado ante las innovaciones de los smartphones y tuvo que cambiar su enfoque.
sáb 05 marzo 2022 08:00 AM
Nokia, de estar en la cima a no a aparecer en el mercado de móviles
Ahora, la empresa es una de las más relevantes en el campo de las telecomunicaciones, desde el despliegue de infraestructura hasta redes móviles.

En la década de los 90 y en la de los 2000, la finlandesa Nokia era la marca predilecta en el mundo de los celulares. Sus teléfonos se veían en todos lados, incluso en telenovelas mexicanas, como el modelo 3320, pero ese dominio en la industria cayó hasta que en 2013 la empresa se deshizo de su división de móviles; sin embargo, eso no significó su muerte.

Otros recuerdos que muchos pueden tener es el juego snake en una pantalla pixelada de fondo verde o la gran durabilidad de los dispositivos, algunos los llamaban tabiques, pero después de ser parte de la industria móvil, su presencia en la tecnología pasó al lado de los ‘fierros’, específicamente a las telecomunicaciones.

El auge y caída en los teléfonos

Durante la primera parte de la década de los 2000, Nokia cosechó grandes éxitos. La compañía alcanzó los 1,000 millones de teléfonos vendidos y dispositivos como el Nokia 1100. Generaron tal sensación que llegó a comercializar 250 millones de unidades durante sus seis años de fabricación.

Mientras los años avanzaban, sus teléfonos se actualizaban un poco más con capacidades como tomar fotografías, filmar videos o reproducir música. Además, la gama de diseños se extendió con velocidad y generaron propuestas para todos los gustos.

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Sin embargo, no logró mantenerse a la par de la revolución que marcó el iPhone en 2007 con sus pantallas táctiles, algo que supieron aprovechar marcas como Samsung, la cual inició a fabricar celulares con el sistema operativo Android. Nokia, en cambio, cayó año tras año y pasó de poseer casi la mitad del mercado a cerca de un 3% a partir de 2012.

La marca intentó ponerse a la par de sus competidores a través del sistema operativo Symbian, pero sus esfuerzos no daban la misma experiencia para los usuarios, los cuales veían mejores actualizaciones tanto en Android como en iOS.

Tras varios periodos oscuros, donde los directivos pecaron de soberbia, pues consideraban que ninguna marca les podía hacer frente, en 2011 se generó la primera relación entre Nokia y Microsoft para tener Windows Phone 7 en sus dispositivos, otro sistema operativo que no logró destacar.

Entre los errores que se cometieron con este sistema operativo, dijo un exingeniero de Nokia, fueron haber subestimado el potencial de Google, las malas decisiones de Steve Ballmer, la mala recepción de Windows 8, así como la fidelidad de los usuarios de iOS y Android a sus experiencias.

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A pesar de los malos resultados, en septiembre de 2013 Microsoft compró la división de móviles de Nokia por más de 7,000 millones de dólares. En ese entonces, la marca aún contaba con 14% del mercado y Windows Phone tenía cierta relevancia.

No obstante, no logró mantener su participación en el mercado de teléfonos móviles, pues pasó de tener un 7% de participación en 2016 a un 2.8% en 2017 tan sólo en Europa, mientras que en los Estados Unidos pasó del 2.8% al 0.8% en el mismo periodo. Debido a ello, en 2016 Microsoft se deshizo de la marca, la cual pasó a manos de HDM Global.

De acuerdo con entrevistas que la Universidad de Cornell hizo a diversos ejecutivos e ingenieros de Nokia, las razones de su fracaso en el mercado de teléfonos fueron la lentitud con la que respondió a los cambios del entorno, además de problemas organizacionales al interior de la empresa.

Telecomunicaciones, la actual motivación de Nokia

A pesar de que su negocio de móviles tenía problemas, en las telecomunicaciones la empresa tenía un mejor rendimiento, aunque no era algo tan relevante para el usuario final. Sin embargo, en 2015 absorbió a la francesa Alcatel-Lucent y se convirtió en el tercer fabricante más importante de equipos de telecomunicaciones a nivel mundial.

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En el último año, las ventas netas de la compañía sumaron 24,242 millones de dólares, un 2% más que un año anterior. Su negocio más relevante fueron las redes móviles, donde obtuvo ingresos por más de 10,000 millones de dólares.

En el negocio de las infraestructuras generó 8,379 millones de dólares, en el área de tecnologías fueron 1,640 millones de dólares, mientras que en el negocio de la nube y servicios sus ganancias fueron de 3,372 millones de dólares.

“2021 fue un año sólido para Nokia, impulsado por nuestro creciente liderazgo tecnológico, una sólida demanda y un reinicio de nuestro negocio más rápido de lo esperado”, dijo Pekka Lundmark, presidente y consejero delegado de Nokia, quien mencionó que para 2022 esperan alcanzar ventas de entre 22,600 y 23,800 millones de euros.

Actualmente cuenta con más de 100,000 empleados y es la tercera empresa más grande de Finlandia, tan sólo detrás del banco Nordea y la proveedora de electricidad del Estado, Fortum.

Su enfoque por el 5G también ha sido relevante, pues tienen en cuenta que esto puede generar un impacto en el incremento de la productividad para diferentes industrias. Según lo dicho a Expansión por Osvaldo Di Campli , presidente de Nokia para América Latina, esta tecnología se podrá usar en actividades como la minería o industrias maquiladoras, donde se automatizan los procesos.

Incluso consideran que el despliegue de la red generará un impacto cercano a los 730,000 millones de dólares para el 2035. Esta cifra, según un estudio elaborado por Nokia y Omdia, se distribuirá entre varios sectores como las TIC (137,000 mdd), manufactura (134,000 mdd), servicios (113,000 mdd), comercio (75,000 mdd), bienes raíces (52,000 mdd) y construcción (51,000 mdd).

Smartphones durables, un concepto que ha retomado la marca

Después de estar en la cima y haber tenido un derrumbe en el mercado de los smartphones, Nokia no se ha olvidado de sus teléfonos, especialmente de los sectores de gama media y baja, donde sigue apostando por la durabilidad.

“La batería es una herramienta que se ha vuelto muy deseada en el mercado de teléfonos, tenemos algunos feature phones que tienen la capacidad de durar hasta veintisiete días sin ser cargados, y algunos smartphones con baterías capaces de durar dos días”, dijo HDM Global a Expansión en 2020.

A finales del año pasado, la empresa también lanzó el Nokia XR20 , un smartphone con características de gama media por su procesador y cámara, además de ser vendido como un dispositivo de uso muy rudo.

Por otra parte, la marca también ha comenzado a incursionar en otros mercados, como el de las tabletas a partir de la Nokia T20 , en donde ya optó por colaborar con Android para integrar su sistema operativo, el cual es ampliamente conocido y le puede dar mayor acercamiento a los usuarios finales.

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