“El plan de negocios de Pemex se ha vuelto cada vez más importante en la comunicación financiera de esta administración (…) Esto es por una serie de decisiones poco ortodoxas que se han tomado respecto a las acciones de la compañía”, dice Zárate.
La Secretaría de Hacienda ha tenido el papel de ser el “adulto responsable” ante los proyectos menos ortodoxos en materia fiscal propuestos desde el gobierno en anteriores administraciones, pero en los últimos meses este rol había cambiado al otro extremo, sobre todo, en materia energética, considera Gonzalo Monroy, director de la consultora GMEC.
“Este papel de Hacienda del adulto responsable, la entidad prudente en la toma de decisiones, es el baluarte de la estabilidad financiera del país. Pero en los últimos seis meses este rol que tenía Hacienda cambió radicalmente de ser el guardián prudente a volverse un habilitador de las decisiones presidenciales”, señala.
La construcción de la refinería de Dos Bocas, uno de los proyectos pilares de la actual administración, pudo generar conflictos entre las promesas del Gobierno de López Obrador, y la disciplina fiscal que buscaba Hacienda, dice Monroy.
De hecho, e l propuesto como nuevo secretario de Hacienda, Arturo Herrera, vivió un episodio de declaraciones cruzadas con el presidente respecto al proyecto de la refinería a mediados de marzo. El entonces subsecretario de la dependencia había dado por muerta la construcción de esta infraestructura, en una entrevista al diario británico Financial Times. López Obrador se apuró a desmentir esta información y reafirmó su intención de continuar con el proyecto.
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