El litio y el golpe de Estado en Bolivia
Evo Morales ha asegurado en varias ocasiones que fue derrocado por un golpe de Estado, después de las elecciones por intereses como los de Estados Unidos por el litio, mientras que en Bolivia no consta que este país pujara con otros como China y Alemania por el codiciado "oro blanco".
Morales aseguró el 16 de diciembre de 2019 en Buenos Aires que se vio forzado a renunciar al poder por un "golpe al litio" y culpó directamente a Estados Unidos.
"Como Estados Unidos quedó fuera, ahí empezó el problema", denunció sobre la exclusión de este país de proyectos para industrializar este mineral en Bolivia, en favor de empresas de China y de Alemania.
Morales cumplió un récord en su país. Con 13 años y 9 meses, se convirtió en la persona que ha gobernado Bolivia por mayor tiempo.
Durante sus tres periodos de gobierno —antes de ser derrocado en noviembre de 2019—, Morales ayudó a que el país tuviera una completa transformación en el ámbito económico y social, aunque no todo se puede agradecer directamente a su gestión.
El 22 de octubre de 2021, en una visita a México —el primer país que lo recibió después de su derrocamiento—, el exmandatario le dijo al presidente Andrés Manuel López Obrador que tenía que proteger el control del mineral porque su industria “debe estar en manos de los Estados, no del sector privado”, de acuerdo con una nota de El País.
“Decidimos, como Estado industrializar el litio. Contratamos expertos... y empezamos la gran industria y ahí viene el golpe del Estado. Congresistas americanos reconocen que el golpe de Estado fue por el litio”, dijo.
El presidente boliviano incluso ha llegado a señalar que Tesla, el principal fabricante de autos eléctricos del mundo, como parte de los responsables de sacarlo del poder.
Con información de EFE