Jordania, país anfitrión, junto con Egipto y Estados Unidos, consideraron "estos acuerdos como un gran avance hacia el restablecimiento y la profundización de las relaciones entre ambas partes", según la declaración.
La reunión se celebró en un clima de ansiedad por la escalada de la violencia en vísperas del mes sagrado musulmán del Ramadán, que comienza a finales de marzo.
Las facciones palestinas, incluido el grupo Hamás, que gobierna la Franja de Gaza, condenaron a la Autoridad Palestina, con sede en Cisjordania, por participar en la reunión.
La reunión congregó a los máximos responsables de seguridad israelíes y palestinos por primera vez en muchos años, según las autoridades, y su objetivo era restablecer la calma en Israel, Cisjordania ocupada por Israel y la Franja de Gaza.
Israel y la Autoridad Palestina "confirmaron su disposición y compromiso conjuntos de trabajar inmediatamente para poner fin a las medidas unilaterales durante un periodo de 3 a 6 meses", según el comunicado.
"Esto incluye el compromiso israelí de poner fin al debate sobre nuevas unidades de asentamiento durante cuatro meses y a la autorización de nuevos puestos de avanzada durante seis meses", añade el comunicado.
Las partes también acordaron reunirse de nuevo en Sharm el-Sheikh (Egipto) en marzo. "Los participantes subrayaron la importancia de la reunión de Áqaba, la primera de este tipo en años", dice el comunicado.