Ante miles de fieles, Milei se inclinó para saludar sonriente y abrazar a su compatriota y sumo pontífice en la Basílica de San Pedro, tras concluir la misa de canonización de la beata María Antonia de Paz y Figueroa, conocida como Mama Antula (1730-1799) y primera santa argentina.
En él, Francisco, sentado en silla de ruedas, bromea con el mandatario. "¿Te cortaste el pelo?", le pregunta con humor el pontífice. "Me emprolijé", responde Milei, conocido entre sus simpatizantes como "el Peluca", y acto seguido le pregunta si le puede dar un beso. "Sí, hijo, sí", le contesta sonriente Francisco, poniendo su mano sobre su cabeza y agradeciéndole la visita al Vaticano.
Cambio de actitud
Milei, un libertario inconformista de derecha, había llamado —antes de postularse para presidente— a Francisco "imbécil" y "hijo de puta que predica el comunismo", pero ha suavizado su tono desde que asumió el cargo en diciembre.
El Papa "es el argentino más importante de la historia", dijo Milei a Radio Mitre el sábado.
El pontífice ha dicho que no prestó demasiada atención a los viejos insultos de Milei, diciendo en una entrevista con la emisora mexicana N+ hace dos meses que lo que le importa es lo que hacen los políticos en el cargo.
El pontífice saludó también cariñosamente a la canciller Diana Mondino, que le dio otro beso. Y a Karina Milei, la secretaria general de Presidencia, —"gracias por apoyarlo a este"—, le dice Francisco refiriéndose a su hermano.