Israel rechaza la acusación
El Ministerio de Exteriores israelí no tardó en reaccionar y rechazó "categóricamente este informe sesgado y mentiroso", pidiendo incluso la disolución de la comisión investigadora.
La cancillería estimó además que el reporte "se basa por completo en las falsedades de Hamás, blanqueadas y repetidas por otros”.
Chris Sidoti, uno de los tres comisionados responsables del informe, rechazó en rueda de prensa los comentarios israelíes e insinuó que parecían sacados de ChatGPT: "Siempre dicen lo mismo" y "nunca aportan pruebas", estimó.
El presidente israelí, Isaac Herzog, también mencionado en la investigación, condenó sus conclusiones, que, según él, malinterpretan sus palabras.
"Mientras Israel defiende a su pueblo y busca la devolución de los rehenes, esta comisión moralmente en bancarrota se obsesiona con culpar al Estado judío, blanqueando las atrocidades de Hamás y convirtiendo en acusadas a las víctimas de una de las peores masacres de los tiempos modernos", afirmó.
El embajador de Israel ante la ONU en Ginebra, Daniel Meron, calificó el informe de "escandaloso" y "falso", afirmando que había sido redactado por "aliados de Hamás”.
"Israel rechaza categóricamente la calumniosa perorata publicada hoy por esta comisión de investigación", declaró Meron a los periodistas.
Israel, que acusa a la comisión de tener una agenda política contra Israel y de desviarse de su mandato, se negó a cooperar con ella.
Cuando se le pidió que respondiera a los comentarios de Israel, Pillay dijo: "Ojalá nos dijeran en qué nos equivocamos en estos hechos, o simplemente cooperaran con nosotros”.
Con información de AFP y Reuters