¿A cuánto ascenderá la pensión?
La pensión completa de los futuros jubilados no podrá ser inferior al 85% del salario mínimo, es decir unos 1,200 euros (1,287 dólares) cuando entre en vigor la reforma.
La medida se aplicará a los ya pensionistas, explicó la primera ministra en enero.
En el sector privado, el cálculo de la pensión se hace con base en los 25 mejores años y en el público sobre los últimos seis meses.
¿Qué pasará con los regímenes especiales?
La mayoría de regímenes de pensión especiales, como los del transporte público de París RATP, las empresas de energía o el Banco de Francia, dejarán de aplicarse para las nuevas personas contratadas en estos sectores, pero los trabajadores actuales conservarán sus privilegios.
En concreto, la llamada "cláusula del abuelo" implica que en esas empresas sólo se someterán al régimen general los trabajadores contratados a partir del momento en que entre en vigor la reforma, que debería ser el próximo mes de septiembre.
Contratación de personas mayores
Uno de los temores del retraso de la edad de jubilación es agravar todavía más un problema particularmente serio en Francia, la baja tasa de actividad de los trabajadores más mayores, que muchas veces están en paro o inactivos.
Para evitarlo, el gobierno francés prevé facilitar el regreso al trabajo de los jubilados para que mejoren su pensión y flexibilizar la jubilación progresiva, que permite trabajar dos años a tiempo parcial antes de retirarse, cobrando una parte de la pensión.
