Los 10 secretos mejor guardados del Golden Gate

(CNN)- El puente Golden Gate es un ícono del área de la bahía de San Francisco y es más que un medio para que los conductores crucen de la ciudad de San Francisco y el condado de Marin hacia el norte.

El puente ha sido una gran presencia en California desde que lo inauguraron tras cuatro años de construcción, en 1937, con un costo de 27 millones de dólares. Ha figurado en el cine (El halcón maltés y La maldición de los exhumadores) y en la poesía (The Changing Light, del poeta Lawrence Ferlinghetti), además de que ha contribuido al folclor local.

Con todo, sigue funcionando: unos 200 empleados trabajan las 24 horas para mantener el puente para los más de 100 mil autos que lo cruzan diariamente, así como para los peatones, ciclistas y pasajeros de los transbordadores y los autobuses.

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Con los ingenieros, herreros y electricistas que mantienen el puente y los pintores que lo mantienen cubierto de Anaranjado Internacional, hay tanta vida debajo y alrededor del puente como sobre él.

"Hay días muy agradables, en los que hay 24 grados afuera y el cielo está claro; puedes ver las Farallons (islas), puedes ver Alcatraz, puedes ver toda la ciudad. Si tenemos que trabajar en los cables, puedes caminar sobre ellos y pensar: 'tengo un trabajo genial'", cuenta Brian Russell, pintor del puente.

Al herrero Darren McVeigh le encanta ver el puente cuando el sol sale o se pone. "Cuando la luna está detrás del puente, en la mañana, es muy agradable y muy tranquilo, el cielo está claro. Es un paisaje hermoso, hermoso. Mi parte favorita es poder decir que trabajo en el puente Golden Gate. Me encanta", cuenta.

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CNN Travel pasó un día recorriendo los rincones del puente y descubriendo estos diez secretos de las personas que lo conocen y lo aman.

"El puente Golden Gate se llama así porque cruza lo que se conoce como estrecho Golden Gate. Es un cuerpo de agua de 4.8 kilómetros de largo y un kilómetro y medio de ancho que conecta el océano Pacífico con la bahía de San Francisco", dijo Paolo Cosulich-Schwartz, portavoz de la Autoridad Distrital de Autopistas, Transporte y el Puente Golden Gate, que opera la estructura.

"El puente había sido una idea desde mediados del siglo XIX, pero la gente pensaba que era imposible construirlo. Las aguas son demasiado agitadas y profundas".

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No es rojo, aunque no estás loco por creerlo así. Los visitantes "dicen que es todo rojo", cuenta Russell.

Anteriormente la Armada estadounidense, que en ese entonces formaba parte del Departamento de Guerra de ese país, supervisaba las vías marítimas y quería pintar este puente de negro y amarillo para que fuera más visible, como un abejorro, explicó otro pinto, Jared Bower.

Cuando empezaron a construir el puente, en la década de 1930, el acero con el que se construyó el puente tenía una cubierta de plomo rojo. Irving y Gertrude Morrow, la pareja de arquitectos a cargo del proyecto, pensaron que el color contrastaba bien con el paisaje del lugar, cuenta Bower. Terminaron mezclando pintura para crear el color Anaranjado Internacional, algo parecido al color rojo del plomo.

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"Cuando trabajamos en este lado, la gente quiere que les pintemos los zapatos o la chamarra. Nos dicen: '¿Me puedes poner un poco de pintura?'", dijo Russell.

¿De verdad quieres? No podemos predecir cómo reaccionará tu familia al Anaranjado Internacional (ya no digamos los vecinos), pero sí, sí puedes. Copia la fórmula de la pintura, que está en el sitio web del puente (¡es gratis!) y llévala a la tienda de pinturas más cercana.

"Descarga el esquema o matriz de color y ve a la tienda de pintura más cercana para que te preparen la mezcla. Puedes pintar lo que quieras de Anaranjado Internacional", dijo Cosulich-Schwartz.

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No, y no es necesario.

Es cierto que la capa superficial se ha repintado totalmente con los años con pintura más amigable con el medioambiente; sin embargo, hay partes que no se han lijado hasta dejar el metal desnudo para repintarlas completamente, de acuerdo con Bower.

Cada dos años los ingenieros del puente lo inspeccionan centímetro a centímetro, de acuerdo con Cosulich-Schwartz. "Con eso se traza un plan de trabajo para saber en dónde hay que pintar" y en dónde se requieren otros trabajos de mantenimiento para que el puente esté en óptimas condiciones.

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Una vez que se desarrolla el plan de trabajo con esas inspecciones, los pintores saben en dónde tienen que pintar. Los herreros del puente arman los andamios en el lugar de trabajo. Crean áreas de trabajo para que los pintores se cambien y se pongan su equipo de protección. Así también se evita que los contaminantes salgan a donde está la gente, que a veces pasa a unos metros del área de trabajo.

Luego los pintores empiezan a lijar con arena la zona que se pintará con el fin de retirar toda la pintura vieja.

Después aplican una capa de 10 milímetros de sellador, seguida por una capa intermedia de pintura y dos capas finales. Esto puede tomar meses, dependiendo del tamaño del área.

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En general, "esperamos que este trabajo de pintura dure 25, 30 años", explicó Bower. Depende de qué parte del puente se haya pintado y qué tan expuesta esté a los elementos. "Hay ciertas partes del puente que conservan la pintura de plomo y que todavía no necesitan pintura. La pintura de plomo era buena en cuanto a mantener la integridad de la pintura".

Es el tono único del puente, creado por cuatro cornetas para niebla con una presión de aire de 80 libras que generan un sonido de 165 decibeles. Su alcance es de casi 10 kilómetros y se activa cuando la niebla es demasiado densa como para que la tripulación de los barcos vea el puente.

Claro que es un respaldo: los barcos tienen su propio sistema de navegación satelital y los pilotos locales se capacitan especialmente para dirigir los grandes buques de carga por el estrecho; sin embargo, nadie quiere arriesgarse a que un barco enorme dañe el puente.

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"La niebla puede ser tan densa que no puedes ver ni a cinco metros al frente. La corneta para niebla se queda activada en ese patrón hasta que lo decidamos, hasta que un empleado note que la niebla se ha levantado", dijo Aaron Kozlowski, jefe de ingenieros operadores del puente.

El personal del puente trató de usar sistemas automatizados para encender las cornetas para niebla, pero la sal dañó el equipo.

McVeigh y sus compañeros herreros, los llamados "vaqueros del cielo" tienen esa responsabilidad. Ya perdió la cuenta de cuántas almas atormentadas ha rescatado a lo largo de los pasados 17 años.

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Si la gente no está dispuesta a hacerle caso a los policías, envían a los herreros para que salgan al otro lado del barandal y los rescaten. "Fijamos una línea elevada, nos aseguramos, pasamos al otro lado del barandal y empezamos a caminar lentamente hacia ellos, empezamos a hablarles para atraerlos, para tratar de que regresen al otro lado del barandal".

Muy pronto, McVeigh tendrá ayuda.

En septiembre de 2018, el puente empezó a construir un sistema de disuasión de suicidios, también conocido como red de seguridad, para impedir que las personas salten del puente Golden Gate. Aunque está diseñado para atrapar a las personas que traten de saltar, su existencia misma se vuelve un disuasivo, de acuerdo con las autoridades del puente. Se espera que esté terminado en 2021.

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De hecho, hay dos, ambos de Joseph P. Strauss, quien presentó los borradores preliminares del puente Golden Gate en 1921 y que trabajó como jefe de ingenieros durante la construcción.

Strauss asistió a la inauguración oficial del puente el 28 de mayo de 1937, pero murió al año siguiente por trombosis coronaria en Los Ángeles.

Cuando se terminó de construir el puente escribió The Mighty Task is Done y The Golden Gate Bridge. Los puedes leer en el sitio web del puente Golden Gate.

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No es un secreto, en realidad. Es fácil caminar o llegar en bicicleta al puente Golden Gate si estás en la zona de la bahía de San Francisco. También es divertido subirte al ferri —que también está a cargo de las autoridades del puente— para recorrer el estrecho (nada más evita la hora pico).

Los aficionados del Servicio de Parques Nacionales disfrutarán de una visita a Crissy Field para ver el puente y jugar en el prado, que forma parte de la Zona Recreativa Nacional Golden Gate, la segunda área del Servicio de Parques Nacionales más popular en Estados Unidos este año.

En Presidio, la antigua base militar que se transformó en sitio del Servicio de Parques Nacionales, hay restaurantes de comida "de la granja a la mesa". La chef Traci Des Jardin inauguró The Commissary, un restaurante de influencia española, junto con Eric Minnich, chef ejecutivo. (Como homenaje al puente, su coctel International Orange es una mezcla de ginebra, vino rosado, amargo de toronja y pomelo, y agua mineral).

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¿Quieres dormir con la vista del puente en tu ventana? Presidio ahora alberga el hotel Lodge at the Presidio y el Inn at the Presidio. Asegúrate de pedir una habitación con vista.